Císcar hizo efectiva ayer su renuncia y su sustituto le relevará en el próximo Pleno

José Císcar registró ayer su renuncia al acta de concejal en el Ayuntamiento de Alicante. Una decisión que en su hasta ahora grupo municipal consideran «correcta» y «lógica» y que no sorprendió ayer excesivamente en el Consistorio, dado que muchos daban por hecho que se retiraría, tarde o temprano, una vez que perdió la oportunidad de liderar la Diputación de Alicante.

Tal y como avanzó ayer este diario, el líder del PP provincial argumenta su renuncia al acta en su intención de dedicarse plenamente a su labor como diputado autonómico y a su cargo dentro del partido.

La portavoz del grupo municipal del PP en Alicante, Asunción Sánchez Zaplana, señaló ayer que Císcar ya le había comunicado personalmente su decisión, que se hizo efectiva ayer, y consideró que es «correcta» y «lógica», dado «el importante trabajo que tiene en el partido y en Les Corts, al que necesita dedicar el tiempo necesario».

Sánchez Zaplana justificó que se trata de una decisión «personal», al igual que lo fue la de Miguel Valor, que renunció a su acta poco después de las elecciones. Tras la segunda retirada en apenas dos meses, la líder del PP en el Ayuntamiento alicantino asegura que no tiene noticias de que se vaya a producir ninguna más, aunque tampoco lo puede descartar, dada la situación existente, en la oposición y con solo tres dedicaciones exclusivas y una parcial.

Desde el equipo de gobierno tripartito, la portavoz del grupo socialista, Eva Montesinos, se preguntaba ayer si Císcar «realmente ha llegado a estar alguna vez en el Ayuntamiento», ya que, señaló, «no hemos oído su voz ni en los plenos ni en ninguna otra circunstancia».

A su juicio, esta situación demuestra «lo poco que le importa al PP Alicante, ya que puso a un señor de Teulada en el número tres de su lista con el único objetivo de presidir la Diputación». La edil dudo acerca de si «ésta es la oposición útil de la que hablan».

Císcar será sustituido en el Pleno del mes de septiembre por Emilio Israel Cortés, una persona de confianza de Sánchez Zaplana, ya que ha trabajado con ella tanto en el Ayuntamiento como en la Conselleria de Bienestar Social. Era el número 10 de la lista y trabajaba como asesor del grupo popular.

«Mariposas en el estómago»

Ayer, Cortés se confesaba todavía «sorprendido» por haber accedido finalmente al cargo de concejal.

«Tengo el estómago lleno de mariposas y algo de vértigo», señaló, aunque destacó que es «un orgullo» poder ser concejal y se mostró dispuesto a «aportar lo que tengo y seguir aprendiendo». Asegura que trabajará «en la calle», como ha hecho siempre, y dará «el 150 por cien».