Condenan a unos padres por permitir el absentismo escolar de sus dos hijas

Un juzgado de Alicante ha condenado a unos padres que tuvieron sin escolarizar a sus dos hijas de 12 y 16 años durante varios meses y, posteriormente, sin vigilar su asistencia a los centros educativos. La juez les impone una multa de 720 euros por un delito de abandono familiar, tras alcanzar los procesados un acuerdo con la acusación pública.

Los progenitores han ido ofreciendo durante la instrucción distintas versiones para justificar lo sucedido. Si bien en un principio alegaron que no habían podido matricular a las niñas por problemas familiares, luego aseguraron que éstas mentían para explicar el elevado número de faltas de asistencia que acumulaban. Sin embargo, desde los centros se alertaba cada vez que las menores no asistían al colegio o al instituto.

La más pequeña debió estar matriculada en el centro escolar del barrio de Babel en septiembre de 2012. Entre octubre de ese año y junio de 2013 acumuló faltas de asistencia todos los meses, al menos del 23% y de hasta el 80% y 73% de las clases. La situación no mejoró en exceso el curso siguiente, el de 2013-2014. Solo en el mes de noviembre acudió a todas la clases.

La otra hija, de 16 años, no fue matriculada en el instituto del mismo barrio alicantino hasta diciembre del curso 2012-2013, aunque faltó de forma íntegra durante tres meses y el resto las faltas fueron del 85%, el 93% o el 97%. Casi la totalidad del tiempo lo pasaba fuera del centro de Secundaria, según ha quedado probado en el fallo judicial, ya que los progenitores reconocieron los hechos en el juicio.

En el curso siguiente, 2013-2014, la menor tampoco estuvo matriculada hasta un mes después de cuando debía haberlo hecho. La adolescente presentó igualmente inasistencias cada mes del período escolar y hasta junio sin que la familia atajase el problema de absentismo.

Ante la gravedad de los hechos, el Ministerio Fiscal interpuso de oficio una querella a comienzos del año 2015 por la presunta comisión de un delito de abandono familiar. Según recoge el fallo al que ha tenido acceso este diario, la situación «era plenamente conocida y consentida por los acusados». De ahí que la magistrada del Juzgado Penal número 8 de la capital sostenga que «no cumplieron con su deber al objeto de prevenir y evitar las faltas de asistencia de las menores».

No obstante, el Ministerio Público retiró su petición de prisión inicial para los dos procesados, ya que las dos partes alcanzaron un acuerdo de conformidad al inicio de la sesión celebrada la semana pasada en el órgano judicial alicantino.

A principios de verano, este mismo juzgado impuso penas de 2.160 euros a otros progenitores por absentismo escolar y eran tres los menores los perjudicados.

La pareja estaba al tanto de que la niña de 9 años debía matricularse en el colegio, cosa que no hicieron, así como que los otros dos menores, de 13 y 15 años, se saltaban con asiduidad las clases. Los hechos ocurrieron entre 2011 y 2013 y, pese a que los padres apelaron la sentencia, la Audiencia Provincial de Alicante ratificó la condena por el delito de abandono de familia.

Pese a que en este caso, como en el anterior, la condenas resultaron de multa, los juzgados de Alicante han impuesto en otras ocasiones penas que conllevan privación de libertad para los padres.