PSOE y EU votan en contra de eliminar a los políticos de las mesas de contratación

Los técnicos supervisarán y aprobarán los concursos de la Diputación Provincial de Alicante, toda vez que los políticos ya no participarán en las mesas de contratación desde que el pleno de la institución aprobara ayer con los votos del PP y Ciudadanos la moción presentada de urgencia. Esta era una de las medidas de transparencia a la que los populares se comprometieron al acceder al gobierno provincial. Por el contrario, PSOE y EU votaron en contra de la propuesta, mientras que Compromís se abstuvo.

El popular Adrián Ballester defendió la exclusión de los políticos en estos órganos de Contratación por «transparencia y objetividad» después de lo ocurrido en los últimos años, algo que debe ayudar «a reflexionar». Por su parte, el único diputado de C's, Fernando Sepulcre, justificó la moción en que en las mesas de Contratación «se juegan muchos contratos».

La propuesta de PP y C's no solo insta a ayuntamientos a la exclusión de los cargos electos así como a que las citadas mesas sean públicas, sino que pide extenderla también a Les Corts Valencianes, el Gobierno central y las federaciones Española y Valenciana de Municipios y Provincias impulsen la medida.

El portavoz socialista, José Chulvi, se manifestó «radicalmente en contra del fondo y la forma» en contra de esta propuesta por creer que es «marketing político y presuponer que cualquier cargo político es un presunto delincuente». Y argumentó la negativa de su grupo a aceptarla: «Hay que dignificar la política y esta moción denigra a la clase política». Mientras, José Manuel Penalva, de Compromís, defendió seis enmiendas porque la Mesa de Contratación «no es fuente de problemas de corrupción» sino que «hay que ver qué hay debajo» de las decisiones de este órgano.

Para el diputado de Compromís, la moción «tiene un carácter político», lo mismo que sostuvo la diputada de EU, Raquel Pérez, para quien se trata de una iniciativa de César Sánchez enmarcada en su «escalada dentro del PP» y que pretende «criminalizar a todos los políticos como corruptos».

Los quince votos del PP más el apoyo de Ciudadanos bastaron para sacar adelante esta propuesta y también para tumbar otras mociones presentadas por la oposición, como el «decálogo por una Diputación sin privilegios» que presentó Compromís.

Durante el debate de la moción , el portavoz del grupo del Partido Popular, Carlos Castillo, reiteró el «compromiso» de la rebaja de los sueldos de los diputados, aunque estará condicionada al presupuesto de 2016: «Habrá una propuesta de bajada de los salarios que se va a concretar con el presupuesto para el ejercicio de 2016», señaló el diputado alicantino.

La moción proponía, entre otras medias, el recorte también del 15% del salario de los eventuales y que los diputados no cobren por asistencia a comisiones y otras entidades dependientes de la Diputación; que las contrataciones de cargos eventuales sea por currículum profesional y no político o que exista un control de la actividad de los diputados como en la telefonía o el uso de coches oficiales, así como de las subvenciones a los pueblos, que habrán de concederse siempre bajo criterios técnicos y ser publicados en un portal de transparencia.

Aunque los distintos grupos manifestaron su acuerdo en varios puntos, el decálogo se retiró. No obstante, el PP se ofreció a «seguir debatiendo» estos temas en la Junta de Portavoces y también en la Comisión de Infraestructura, Modernización y Buen Gobierno «que para esto está», apuntó Castillo.