Navarro destaca el papel del agente encubierto ante los delitos de terrorismo

El presidente de la Audiencia Nacional, José Ramón Navarro, ha destacado hoy el papel que desempeñará el agente encubierto informático contra los delitos relacionados con el terrorismo, con el acceso a internet a páginas yihadistas.

Navarro ha expuesto esa consideración en un debate sobre medios de investigación tecnológica, celebrado en la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche dentro del congreso internacional de Derecho Procesal "Retos y exigencias de la Justicia. Las reformas que nos vienen y las reformas necesarias".

En su intervención ha señalado la importancia del agente encubierto informático -figura que entrará en vigor el próximo mes de diciembre dentro de la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal-, que nace debido a las diversas formas de ciberdelincuencia que se producen en la actualidad en internet, aunque ha expuesto la dificultad de conocer al ciberdelincuente.

En este sentido, Navarro ha indicado que uno de cada veinte delitos cibernéticos que se denuncian son averiguados de alguna forma por los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.

Por otra parte, ha explicado que el agente encubierto informático podrá emplear identidades falsas en internet y redes sociales, participar en canales cerrados de comunicación y enviar e intercambiar archivos relacionados con la investigación, siempre bajo una autorización judicial.

Dentro de sus cometidos, podrá perseguir aquellos delitos cometidos por la delincuencia organizada como secuestro, terrorismo, narcotráfico, prostitución, tráfico de órganos humanos y trasplantes o trata de personas, entre otros actos delictivos.

Aunque ha precisado que en esta reforma de la ley no se incluyen delitos de revelación de secretos o daño informático.

Navarro ha recordado que la figura del agente encubierto como tal existe desde años aunque la legislación no hablara sobre ello y ha puesto como ejemplo el caso de 'El Lobo', un infiltrado por los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado en la banda terrorista ETA durante la década de los setenta que contribuyó a la detención de 150 miembros de esta organización en aquella época.