Puig ratifica que convocará las 1.216 plazas de empleo en Sanidad que están pendientes

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, reiteró ayer que en el ámbito sanitario de la Comunitat se podrán en marcha el próximo año un total de 1.216 plazas de empleo, a las que se añadirán en educación unas 1.000. Puig se refirió así a las plazas correspondientes a las ofertas de empleo público (OPE) en el sector sanitario de 2014 y 0215 que están pendientes de convocarse y que fueron aprobadas por el anterior equipo de Gobierno del Consell, del Partido Popular (PP). La previsión de Sanidad es que comiencen a salir a final de este año y ya avanzó que se quiere negociar con los sindicatos una nueva OPE.

En la misma línea, Puig afirmó que trabajarán para acabar con la «interinidad» que existe en justicia, ya que puntualizó que el 21% de los trabajadores públicos en esta área son interinos.

Así lo avanzó en la sesión de control al presidente de la Generalitat del pleno de las Corts, tras una pregunta formulada por el síndic de Compromís, Fran Ferri, sobre las medidas que tiene previsto adoptar el Consell para dotar los servicios públicos de personal suficiente y mejorar la atención a los valencianos, ya que puntualizó que la Comunitat Valenciana es la segunda autonomía con menos empleados públicos.

El jefe del Consell apostó por «superar la tasa de reposición» porque «quedan muchísimas plazas por cubrir» y, aunque destacó las «barreras» que existen al respecto, como son «la falta de financiación y las restricciones impuestas por el Estado», aseguró que este año ya se pueden cubrir 262 plazas correspondientes a la oferta pública. Del mismo modo, se pondrán en marcha «inmediatamente» los concursos de traslado, de modo que la primera convocatoria se producirá en 2016 para la administración general.

El presidente aseguró que está «claramente en contra» de la privatización de los servicios y calificó de «auténtica falacia decir que eficiencia y privatización son lo mismo». «Puede ser tan eficiente un recurso gestionado de una manera u otra, lo fundamental es evaluar y ver cómo se invierten adecuadamente los recursos», resaltó.

Puig abogó por dotar de «rigor y fuerza» a la administración de la Comunitat y apoyar a los funcionarios, ya que «necesitan que su Gobierno esté a su lado para mejorar la prestación de los servicios públicos». Añadió que la falta de empleados públicos supone que «los servicios no pueden ser de la calidad que merecen los ciudadanos». «Queremos buscar la eficiencia, la eficacia, pero eso no se consigue atacando a funcionarios, como muchas veces se ha hecho», resaltó el presidente de la Generalitat, quien considera que hay que «modernizar» la administración valenciana.