El alicantino Mario Gaspar ejecuta la media volea que propició el 1-0. :: a. domínguez

La estrella de Mario se eleva al cielo en Alicante

El lateral alicantino pone en pie el José Rico Pérez con su golazo, el segundo que marca con la absoluta

MIRIAM CUTILLAS

Sábado, 14 de noviembre 2015, 02:29

Alicante tenía ganas de selección y los británicos de disfrutar de la ciudad. El Rico Pérez se vistió de gala para recibir a La Roja y los aficionados no defraudaron colgando el cartel de no hay billetes. Cerca de 30.000 espectadores llenaron de ilusión el feudo herculano, una afición que tenía tantos anhelos de ver fútbol de primer nivel que, por primera vez desde hacía algunos meses, silenciaron con aplausos los pitos a Piqué. Hasta los ingleses corearon al central catalán.

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Los de Vicente del Bosque tardaron poco en hacerse dueños del balón para comenzar a desplegar el 'tiki taka' que tanto tiempo hacía que no se veía. Iniesta se hizo dueño y señor del centro del campo y comenzó a mover el balón a su antojo. Diez minutos necesitó para llegar con claridad al área inglesa y conseguir el primer córner. Poco antes lo habían intentado los británicos desde fuera del área sin mucha puntería. Solo cinco minutos después, el central del Barça agradeció los aplausos con un fantástico disparo desde fuera del área que iba directo a portería, pero Bertrand despejó a córner. La selección comenzaba a gustarse y los ingleses no pasaban del centro del campo. Busquets lo volvió a intentar desde la frontal, tras un córner votado por Cesc y una buena jugada individual de Diego Costa dentro del área que no tuvo disparo.

En el minuto 25 llegó el primer susto de la noche, Thiago se tiró al suelo y pidió el cambio. Su rodilla no le permitía seguir jugando. Entró en su lugar Cazorla, entre los aplausos de españoles y británicos.

Poco después, el delantero centro del Chelsea, Costa, arrancó los primeros ¡uys! de la noche con un gran disparo a la escuadra izquierda de la portería de Hart, que salió ligeramente desviado. Al contragolpe contestó Inglaterra con una gran jugada de Barkley, que llegó muy forzado para un remate que terminó en las manos de Casillas, que aún no había tocado un balón. La primera parte acabó con total dominio de La Roja, que a pesar de apostar por dos delanteros, no consiguió mover el marcador del cero a cero inicial. Por falta de gol o por algunas molestias de Iniesta, tal vez ambas cosas, Del Bosque decidió en el inicio de los segundos 45 minutos dar entrada a Nolito.

Y de las botas del ariete celtiña salieron las mejores ocasiones de la selección española. Sus ganas, su maravilloso estado de forma y su frescura le dieron otro aire al ataque del equipo, que empezaba a crear ocasiones claras de gol. En el 60 llegaron los primeros cambios en las filas inglesas, salieron Delph y Lallana y entraron Alli y Dier. También abandonó el terreno de juego Costa, para dejar su sitio a Juan Mata y volver así al 4-3-3 dejando en punta a Alcácer. El cambio de sistema le dio más protagonismo a Nolito, que se echó a la espalda la responsabilidad del ataque español y lo intentó una y otra vez.

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Los ingleses avisaban al contragolpe, pero pocas veces conseguían acercarse con peligro a la meta de Casillas, que no tocó el balón en la segunda parte hasta el minuto 22. La selección de Roy Hodgson tenía mucha velocidad pero poca creatividad en el ataque. Las gradas del Rico Pérez se arrancaron a corear el nombre de Piqué en el minuto 70, cansados de los débiles pitos que se escuchaban cada vez que el central culé tocaba un balón.

El único alicantino en la selección española puso en pie a los 30.000 espectadores del Rico Pérez con un precioso gol, tras un buen pase de Cesc, que por fin ponía a la selección por delante en el marcador. Sabiendo de la importancia de ser profeta en tu tierra, sus compañeros hicieron piña alrededor del noveldense, mientras el estadio festejaba el gol, como si de una final se tratara. Mario Gaspar marcaba así su segundo gol en su segunda convocatoria con el combinado nacional. El lateral derecho del Villarreal está aprovechando las oportunidades de Del Bosque a golpe de goles y, sobre todo, de buenas actuaciones.

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Tras el gol de Mario llegó el tercer cambio en las filas inglesas y Alicante pudo disfrutar de Rooney, que entró al terreno de juego por Barkley. También abandonó el campo Alcácer, que no había tenido su mejor partido, y ocupó su lugar Pedro Rodríguez. La selección seguía teniendo el balón e imponiendo su ritmo de juego al partido. Los españoles se acercaban con peligro a la portería de Hart. Mata a punto estuvo de hacer el segundo, tras un gran pase de Cesc que le dejó solo ante el portero, pero el balón terminó en los pies del cancerbero inglés. Tanto lo intentó la selección que en el 83 cayó el segundo de las botas de Santi Cazorla, que ya lo había intentado antes desde fuera del área. No fue el mejor partido de Cesc en la distribución y recuperación del balón, pero terminó el partido con dos asistencias que terminaron en gol.

Del Bosque quería hacer participar a todos sus jugadores e hizo entrar a Azpilicueta por Bartra, pese a que el lateral no está habituado a jugar en el centro de la defensa. Aún así no se encontró con problemas para cuajar una buena actuación en esa posición. Koke entró al centro del campo para darle descanso a Busquets, que se había hecho con el mando del juego, tras la salida de Iniesta.

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Mientras tanto, Casillas seguía siendo un espectador más del partido, porque los ingleses ya habían renunciado al ataque, al menos hasta los minutos de descuento. Momento en el que llegó la parada del capitán de la selección, tras un gran disparo de Kane. Con esa parada y los vítores a Iker acabó un amistoso de lujo que tuvo como escenario el feudo blanquiazul. Alicante disfrutó de buen ambiente, de los mejores jugadores de Europa, de buen fúbol y de un gran gol marcado, además, por el único alicantino en el terreno de juego.

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