Alicante proyecta un cuarto contenedor de residuos para la materia orgánica

La ciudad de Alicante proyecta la colocación de un cuarto contenedor de basuras para la recogida separada de materia orgánica, reciclable como compost, con el fin de que acabe en el vertedero mezclada con otros residuos.

Al término de un minuto de silencio a las puertas del ayuntamiento en repulsa a los atentados de París, el vicealcalde de Alicante, Miguel Ángel Pavón, ha explicado hoy a los periodistas que el ayuntamiento ha trasladado a la empresa adjudicataria su deseo en comenzar esta recogida más selectiva, que figura en el pliego como recomendación y no como obligación.

Pavón ha comentado que desconoce si podrá ponerse en práctica durante 2016 ó 2017, aunque ha insistido en que la pretensión es que se instaure este cuarto contenedor (con un color diferente) como paso previo a un futuro sistema de recogida 'puerta a puerta'.

El 'puerta a puerta', que ya está implantado en otros países como en la capital belga, Bruselas, será el "paso definitivo para garantizar la recogida selectiva" de residuos, en palabras de Pavón.

Una vez que se logre separar la materia orgánica de los desechos difícilmente clasificables (al igual que ya ocurre con el papel y cartón, cristales y plásticos y envases), se reducirá drásticamente la cantidad de residuos que acaban en el vertedero y la vida útil de éstos se alargará.

Pavón ha considerado que la recogida 'puerta a puerta' debe ser ensayada primero en zonas piloto de la ciudad, como podría ser el barrio de Divina Pastora o de Rabasa, por ser de viviendas unifamiliares, antes de adoptarse en toda la ciudad.

El vicealcalde ha manifestado que, paralelamente, habría que emprender una campaña de concienciación a los ciudadanos para que cambiaran los hábitos e incorporaran a su rutina esta separación adicional de los residuos.

Además de prolongar la vida de los vertederos, entre los beneficios de separar la materia orgánica está la reutilización para compost y que haya menos aves que acudan a comer al vertedero, por ejemplo la gaviota patiamarilla, que por culpa de este punto de alimento incontrolado amenaza con desplazar a otras especies de aves de la zona.

La gaviota patiamarilla es una especie no protegida que cuenta con una población "excesiva" e "indeseada", por su alto número, entre la isla de Tabarca y el vertedero de Fontcalent.

Pavón también se ha referido al paraje natural de los saladares de Aguamarga y a la actividad con el cercano aeropuerto de Alicante-Elche, en El Altet, y ha señalado que las aves de ese espacio no afectan a la seguridad de la actividad aeroportuaria.

Entre los mecanismos para asegurar esta convivencia sin problemas ha citado la que ya existe de la cetrería para ahuyentar a las aves, y ha opinado que reforzando este servicio "sería más que suficiente" para evitar conflictos.

Pavón ha puesto el ejemplo de otros aeropuertos españoles cercanos a parajes naturales, como El Prat junto a un espacio en el Llobregat, donde "no hay problema".

"Es compatible la recuperación ambiental con un aeropuerto relativamente cerca y la seguridad aérea", ha sostenido.