Los bomberos prenden el Pleno

Los efectivos del Servicio de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamento (Speis) de Alicante denunciaron ayer públicamente su situación al presentarse no menos de medio centenar de bomberos al Pleno para reprocharle directamente al alcalde la reducción de los servicios mínimos por turno y la carencia organizativa.

El último decreto de la Concejalía de Seguridad, según explicaron, baja a 24 el número de personal por turno, lo que consideran «peligroso» tanto para ellos (porque peligra su integridad física) como para la ciudadanía, porque redunda en la calidad del servicio. Tampoco la situación organizativa del Speis es ahora la mejor, sin jefatura y con tres mandos intermedios que han renunciado en las últimas semanas.

Con este clima, los bomberos acudieron en masa desde primera hora a la Casa Consistorial. Desde el Salón Azul siguieron el Pleno, esperando su momento. Estallaron en la moción de Ciudadanos, en la que su portavoz, José Luis Cifuentes, pedía que la Casa del Fuego (el simulador de siniestros que hay en el parque Ildefonso Prats) se abriera a otros cuerpos de Bomberos como centro de formación a cambio de una tasa. «¡No funciona!»; «No hay bomberos»; «No tenemos jefes», gritaban los efectivos desde el fondo de la sala.

Fue entonces cuando descubrieron unas pancartas en las que se decía 'Echávarri, cumple los mínimos'. Mientras protestaban, algún que otro espectador se enzarzó con los bomberos a los que acusó de «cobrar mucho y trabajar poco». Fue el único incidente que se produjo, puesto que los bomberos bajaron tranquilamente a la calle.

El concejal de Seguridad, Fernando Marcos, aprovechó el receso del Pleno (que se produjo tras la discusión del punto de C's) para dialogar con los representantes de los bomberos a las puertas de la Casa Consistorial. Aseguró que su departamento había tenido que pedir 80.000 euros para poder terminar el año en el servicio de Bomberos y que ya se había comenzado a tramitar la contratación de un nuevo jefe del Speis.

Los efectivos le recriminaron al concejal que «faltaban bomberos», por lo que reclaman que los 12 interinos que ahora hay tengan plaza y se contrate más personal. «Necesitamos un mínimo de 25 operativos mínimos por servicio» (con capacidad de actuar en un fuego), además de personal de ayuda y servicio, frente a los 24 del último decreto. «No hay gente para atender a los ciudadanos», le insistían a Marcos, «porque nos jugamos la vida al entrar uno solo a un incendio».

La contratación de personal, entienden, es necesaria porque tienen actualmente unas condiciones de trabajo insatisfactorias: «Somos los únicos obligados a coger las vacaciones en diciembre y trabajamos tres fines de semana al mes», le reprochaba uno de los bomberos al concejal de Seguridad. Otro le recordó que no querían más dinero, sino que peleaban «por dar un mejor servicio».

Fernando Marcos expuso también a estos trabajadores las apreturas del Ayuntamiento, que vienen de la anterior legislatura. Este periódico ya ha reflejado la falta de medios que ha sufrido el Speis desde hace años.