La alerta antiterrorista eleva a 2.000 los policías que vigilan las zonas comerciales

Unos 2.000 policías nacionales velarán por la seguridad ciudadana durante estas fiestas navideñas en las principales zonas comerciales de la Comunitat Valenciana. El dispositivo policial se enmarca dentro del Plan de Comercio Seguro que ha puesto en marcha este mes la Delegación del Gobierno para proporcionar un entorno seguro a los comerciantes y a los ciudadanos en los lugares de mayor afluencia de gente y de interés turístico.

El refuerzo policial contará con agentes uniformados y también de paisano para evitar los hurtos que cometen de forma organizada los grupos de carteristas, así como para prevenir otro tipo de delitos. Los policías realizarán servicios de vigilancia a pie en zonas de aglomeración de comercios, y también mantendrán contactos personales con los empleados de los establecimientos.

Por provincias, el dispositivo policial dispondrá aproximadamente de 1.200 policías nacionales en Valencia, otros 420 en Alicante y 400 más en Castellón. El delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues, afirmó que el Plan de Comercio Seguro se solapa con otro importante dispositivo para prevenir atentados yihadistas, al continuar el nivel 4 de alerta antiterrorista, y por lo tanto, habrá más policías y guardias civiles en la calle.

El pasado 26 de junio, el Ministerio del Interior elevó la alerta antiterrorista a niveles que no se conocían desde los días posteriores al 11-M. Después de los atentados de París, el Gobierno decidió mantener el nivel 4, inmediatamente anterior a la movilización de las Fuerzas Armadas en misiones de protección ciudadana. Los Servicios de Información de la Policía Nacional y de la Guardia Civil se encuentran en alerta, al igual que los agentes del Centro Nacional de Inteligencia, tras descubrir planes yihadistas para atentar en territorio nacional.

Delincuencia común

Durante estos días, las zonas comerciales y de ocio reúnen a un gran número de personas y son un entorno perfecto para la actuación de carteristas, timadores y otros delincuentes. Por ello, la Policía Nacional intensifica la colaboración con la seguridad privada, así como los contactos y reuniones con comerciantes y asociaciones.

«Es una seguridad objetiva y subjetiva. Habrá más patrullas uniformadas y la policía también proporcionará al ciudadano una seguridad objetiva», según Moragues, porque intensifica la labor «contra los carteristas y la gente que se aprovecha de los descuidos ante tanta aglomeración de personas».

El Plan de Comercio Seguro de 2014 se saldó en la Comunitat Valenciana con 673 detenciones, 490 de ellas en Valencia, 102 en Alicante y 81 en Castellón. Este operativo de seguridad se lleva a cabo en dos fases, y en la primera, la policía contacta con las asociaciones de comerciantes, grandes superficies comerciales y colectivos de ciudadanos para recabar información y establecer la segunda fase: los servicios de vigilancia.

Una vez determinados los lugares de afluencia de público y las franjas horarias de mayor actividad comercial, las comisarías distribuyen las patrullas policiales. También se han elaborado unos trípticos para informar a los comerciantes cómo pueden mejorar las medidas de seguridad en sus establecimientos.