El clima y las reservas de última hora llenan los hoteles de Benidorm durante el puente

El puente festivo de la Purísima, aun siendo día laborable el lunes día 7 en algunas comunidades autónomas emisoras de turistas como Madrid, ha dejado patente dos cosas: que el consumo interno familiar en España se recupera con firmeza y que el efecto de la reserva de última hora se ha instalado durante la crisis para quedarse. Así lo explicaron ayer a este diario algunos de los notables del sector turístico de la Costa Blanca, cuya capital del ocio por excelencia, Benidorm, alcanzó el cien por cien de ocupación, lo que, en denominación del presidente de la patronal hotelera Hosbec, Antoni Mayor, se considera lleno 'técnico'.

La previsión oficial de la Secretaría de Turisme de la Generalitat Valenciana apuntaba a una ocupación media en Benidorm del 95%. Pues bien, el lleno ha sido prácticamente total entre la noche del viernes día 4 y la de ayer día 8, según explican Mayor y Beatriz Domínguez, la directora de dos de los más importantes hoteles del grupo Magic Costa Blanca de la familia García, Villa Venecia y Villa del Mar.

«Hemos tenido muy buen resultado en todo el grupo, prácticamente el cien por cien de ocupación, en los dos hoteles que yo dirijo se ha llenado de turistas todo el puente», explica Domínguez, quien hace extensible esta situación también al Cristal Park, un hotel de tres estrellas también muy popular. Destaca que este año ha llegado a Benidorm más gente del norte de España y de las provincias de Barcelona y Tarragona. «En general, creo que ha venido más gente nacional de lo que era habitual durante la crisis y, encima, ha funcionado mucho el efecto última hora, porque se ha llenado todo de un día para otro, a prácticamente dos días visto el puente de la Constitución», afirma esta ejecutiva hotelera. Añade a la recuperación del gasto familiar un elemento que no puede pasar por alto en estas fechas: el climatológico. «Nos ha acompañado el buen tiempo durante todos los días y no era difícil ver a gente tomando el sol y bañándose, uno de nuestros principales reclamos turísticos, con una especie de verano en pleno diciembre», añade Beatriz Domínguez.

El presidente de Hosbec también argumenta estos dos factores, aunque, según él, el buen funcionamiento del puente ha sido una conjunción de elementos. A la mejora del consumo interno en España y las temperaturas mucho más suaves de lo normal a estas alturas del año une que el turismo inglés sigue tirando con mucha fuerza incluso en invierno, más que en los últimos años; que se están cumpliendo por parte del Imserso los cupos de turismo para mayores con el envío de jubilados de toda España; y que el precio en este puente festivo del año es el que tiene las tarifas más económicas de todo el año. Unos precios, según Mayor, mucho más asequibles que en los puentes festivos de las Fallas o del día de la Comunitat Valenciana y la Hispanidad.

Primer gran test

El presidente de los hoteleros está convencido de que ha sido el primer gran test del sector turístico para la temporada de invierno y de la próxima primavera y verano. Asegura que el largo fin de semana revela la pujanza del turismo de proximidad con ciudadanos de la propia Comunitat y las vecinas Murcia y Albacete, pero también la recuperación del pulso del turista del centro y norte de España e incluso de Cataluña, lo que podría verse confirmado, no ya en Navidad, donde la venta es «estupenda» con el cartel de completo en muchos establecimientos de Benidorm, sino en el puente de San José y Semana Santa, el termómetro más fiel para la temporada alta de verano.

Alicante se queda igual

La presidenta de la Asociación Hoteles de Alicante, Cristina Rodes, muestra su satisfacción porque la planta hotelera de la capital y el área metropolitana se ha quedado en un 60% de ventas, igual que el año anterior y ligeramente superior al 55% previsto por la Turisme de la Generalitat, «pese a no haber ningún evento especial».