PPLL
Lunes, 14 de diciembre 2015, 00:30
El atletismo y la música van de la mano en la vida de Mikel Erentxun. No esperaba el cantante de Duncan Dhu que su primera participación en la Behobia-San Sebastián cambiaría su vida. «Marcó un antes y un después en mi vida. La crudeza del recorrido y el placer de cruzar la meta me llenaron de tal forma que no tuve más remedio que dedicarme a ello con total intensidad», admite.
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En su conversación para completar el 'kilómetro 24' del libro, Erentxun transmite sus experiencias como corredor de fondo y lo que le aporta el 'running' a su faceta profesional. «Correr me mantiene en forma y me da la energía que necesito para la puesta en escena. Necesito correr para estar en forma, para transmitir fuerza desde el escenario», explica el músico donostiarra, que siempre mete las zapatillas de correr en el equipaje que lleva para las giras. «Pienso, creo y produzco música mientras corro», sentencia Erentxun.
Una de sus grandes experiencias fue disputar el maratón de Nueva York, aunque después llegó otra que todavía le ha marcado más, el maratón de montaña de Zegama. «Cada vez me decanto más por la montaña, la considero más saludable», admite. «Tuve un problema cardiaco, pero ahora estoy tan bien que corro mejor que antes».
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