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Teresa de Calcuta. :: epa
Teresa de Calcuta será santa el 4 de septiembre gracias a una canonización exprés

Teresa de Calcuta será santa el 4 de septiembre gracias a una canonización exprés

El Papa ha reconocido el milagro que impulsa su elevación a los altares: la curación de un joven aquejado de un tumor cerebral

DARÍO MENOR

Sábado, 19 de diciembre 2015, 00:38

La Madre Teresa de Calcuta será declarada santa el año que viene, probablemente el 4 de septiembre, un día antes de que se cumplan 19 años de su fallecimiento. Francisco reconoció el pasado jueves, cuando celebró su 79 cumpleaños, el milagro que impulsa la canonización de esta religiosa albanesa de nacimiento e india de corazón, que dedicó su vida a los más desfavorecidos. Lo confirmó ayer el Vaticano en un comunicado. La ceremonia en la que el Papa inscribirá en el libro de los santos a esta mujer, galardonada con el Nobel de la Paz en 1979, será uno de los eventos destacados del Jubileo de la Misericordia, inaugurado por el Pontífice la semana pasada.

Beatificada por Juan Pablo II el 19 de octubre de 2003, la fundadora de las Misioneras de la Caridad será santificada al justificar el milagro que se habría producido gracias a su intercesión. Se trata de la curación milagrosa en Santos (Brasil) de un ingeniero de 35 años que sufría un tumor cerebral. Desde que le diagnosticaron la enfermedad, su esposa, su párroco y su familia rezaron de forma pertinaz a la Madre Teresa pidiéndole que intercediera ante Dios para que se curara.

El hombre iba a ser operado de emergencia el 9 de diciembre de 2008. Estaba en coma y ya prácticamente desahuciado. Pero hubo un problema con la anestesia y se retrasó la intervención media hora. Cuando el cirujano volvió a la sala, se encontró al hombre consciente y sin dolores. Incluso le preguntó: «¿Qué estoy haciendo aquí?». Al examinarle al día siguiente, el médico descubrió que no había rastro del tumor y que había recuperado todas sus funciones cognitivas. «Nunca vi un caso como éste. No puedo dar una explicación científico-médica», reconoció el galeno. Según cuenta el postulador de la causa de canonización, el sacerdote canadiense Brian Kolodiejchuk, el 'miracolato' incluso recuperó la fertilidad y engendró dos hijos. Una prueba había certificado que había quedado estéril debido al tratamiento para intentar curar el cáncer.

Proceso rápido

Aunque habrá que esperar a la próxima reunión entre Francisco y los cardenales para que se haga pública de forma oficial la fecha de la canonización, se da por casi seguro que será el domingo 4 de septiembre. Se espera una evento multitudinario. Alguna agencia comenzó ayer mismo a promocionar una peregrinación a Roma para participar en la ceremonia -la beatificación de hace doce años convocó a más de 400.000 personas-. El proceso con el que alcanzó el grado previo a la santidad fue rápida, ya que Juan Pablo II permitió que la causa comenzase sólo dos años después del fallecimiento, en vez de los cinco que establece el Derecho Canónico.

El milagro que propició que Agnes Gonxha Bojaxhiu (el nombre oficial de la religiosa) se convirtiera en beata fue otra curación inexplicable para la ciencia. En este caso la beneficiada fue Mónica Besra, una mujer india que sufría un cáncer de ovarios por el que los médicos la habían desahuciado. Se curó después de que una monja le colocara una estampita con la imagen de la religiosa .

Francisco conocía personalmente a Madre Teresa, pues ambos coincidieron en el Sínodo de los obispos de 1994. Durante aquellas reuniones, la religiosa se sentaba detrás del que hoy es obispo de Roma. «Decía siempre lo que quería. Admiré su fuerza, la decisión de sus intervenciones, sin dejarse impresionar por la asamblea de obispos», recordó Bergoglio durante su viaje a Albania en 2014. «¡Me habría dado miedo si hubiese sido mi superiora!», dijo entonces el Papa.

Durante el proceso para su beatificación se descubrió que sufría de crisis religiosas y que llegaba hasta poner en cuestión la existencia de Dios. «Jamás he visto que me cierren una puerta. Creo que eso ocurre porque ven que no voy a pedir, sino a dar. Hoy en día está de moda hablar de los pobres. Por desgracia no lo está hablarles a ellos».

Solía decir que su contribución era sólo una «gota en un océano de sufrimientos», pero que «si no existiera, esa gota le haría falta al mar».Al morir, el gobierno indio le dedicó un funeral de Estado y su féretro fue trasladado por gran parte de la ciudad en el mismo carruaje en el que fueron llevados los restos de Mahatma Gandhi.

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