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El teniente general Rafael Comas saluda al paso de los militares valencianos, ayer, durante el acto de conmemoración de la Pascua Militar. :: juanjo monzó

Los 'boinas verdes' de Rabasa tendrán una nueva unidad de élite contra el yihadismo

El Ejército da más peso a la base alicantina conun cuarto grupo de Operaciones Especiales y un previsible aumento de efectivos

J. A. MARRAHÍ

Jueves, 7 de enero 2016, 00:31

La Comunitat adquiere una creciente relevancia a nivel militar. Tanto dentro, como fuera de nuestras fronteras. En el mismo año en el que el Cuartel General de Bétera está ya de guardia ante una posible activación como la fuerza de despliegue más rápida de la OTAN, el Ejército ha decidido dotar a los 'boinas verdes' de la base alicantina de Rabasa de un nuevo grupo de operaciones especiales, los efectivos con mayor capacidad en la lucha directa contra el yihadismo o en la instrucción de otras fuerzas extranjeras con el mismo propósito.

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De hecho, decenas de miembros del Mando de Operaciones Especiales (MOE) se encuentran actualmente adiestrando al ejército iraquí y mejorando sus técnicas para hacer frente a los terroristas que han tomado posiciones en el país. También destaca su presencia en Mali, Afganistán o Líbano. La versatilidad e importancia de sus capacidades de élite, así como su continua presencia en misiones internacionales, es lo que ha empujado a Defensa a fortalecer el MOE, con sede en la base militar alicantina de Rabasa.

Los 'boinas verdes' de Alicante, con alrededor de 800 efectivos, estaban hasta la fecha distribuidos en tres grupos de Operaciones Epeciales. Desde el 1 de enero entró en funcionamiento una cuarta unidad bautizada como Granada II. Esta restructuración no conlleva un aumento de efectivos de manera inmediata, pero según fuentes de Defensa sí parece previsible una ampliación en su número a medio plazo.

La razón estriba en el gran protagonismo que han adquirido estos equipos de élite del Ejército de Tierra. Dicho de un modo sencillo, son posiblemente el tipo de militar más demandado, tanto en los brotes de violencia por conflictos civiles internos como en la labor de entrenar a otras fuerzas extranjeras que combaten al Daesh.

El actual nivel de necesidad de los 'boinas verdes' para misiones internacionales estaba generando cierto desequilibrio en el MOE, puesto que existen tiempos de formación, preparación de misiones, despliegue y descanso que resultaba complicado cumplir con sólo tres grupos.

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La sede de Capitanía General de Valencia fue ayer escenario de la Pascua Militar, la última con el teniente general Rafael Comas como máximo representante de las Fuerzas Armadas en la Comunitat. Con casi toda su vida militar al servicio de la región, llegó al más alto puesto regional en 2011, al ser ascendido a teniente general y nombrado jefe del Cuartel General de Bétera. En su tiempo de mandato, la confianza de la OTAN en la base ha ido en aumento. En pocas semanas, Comas pasará a la reserva. El alto mando se mostró «agradecido a las instituciones y al pueblo valenciano por su cariño y apoyo». Según confirmó el propio general, todavía no se conoce quién le sustituirá. La decisión deberá tomarla el Consejo de Ministros a propuesta del de Defensa. Lo que parece claro es que cuando Comas cese en su cargo, lo ocupará provisionalmente su actual segundo, el general de división Juan Montenegro.

Otra unidad para drones

En su discurso, el general Comas se refirió también a la creación de una nueva unidad que depende, orgánicamente, del Regimiento de Inteligencia (RINT-1), con base en Valencia. Se trata del Grupo de Obtención por Sistemas Aéreos (GROSA), especializado en el manejo de los drones espía del Ejército. Las aeronaves no tripuladas tienen su base física en León, pero son material de la unidad con sede en Valencia y ya se han realizado los primeros vuelos en territorio español.

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El alto mando también resaltó el apoyo del Politécnico en los sistemas de mando y control de la base de Bétera, puestos a prueba con el reciente macroejercicio de la OTAN que acogió España. La Alianza ha calificado como «capacidades únicas» estas técnicas de telecomunicación militar bajo el amparo universitario.

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