M. H. /J. C. F.
Jueves, 21 de enero 2016, 01:34
Mónica Oltra no acostumbra a gestionar derrotas. La líder de Compromís, como abogada que es, se mueve como pez en el agua en las situaciones más comprometidas, en las que requieren largas negociaciones, agotar plazos y llevar a los rivales hasta el límite. Peso el reglamento del Congreso de los Diputados se ha convertido en un escollo infranqueable hasta para ella. Y con la imposibilidad cantada de conformar grupo propio en Madrid, tras el cese temporal de la convivencia con Podemos, el debate ahora pasa por cómo resolver con el menor número de heridos el destino de los cuatro parlamentarios de Compromís en el Congreso. Porque más allá de grupos, lo que realmente está sobre la mesa es el futuro de la coalición valenciana.
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El presidente de Les Corts y líder del Bloc, Enric Morera, abrió ayer la caja de los truenos que deberá cerrarse antes del viernes, cuando la Mesa del Congreso fija las 72 horas desde la negativa que ayer dio a la propuesta de grupo presentada por sólo cuatro diputados de Compromís. El trasvase de los cuatro diputados valencianos a Podemos «es imposible», dijo ayer en referencia al destino de los parlamentarios en la Cámara Baja. «Compromís actuará unido, como ha actuado siempre», dijo el líder del Bloc. Poco antes, el cabeza de lista de la coalición, Joan Baldoví, ya había adelantado que se mantendrían en el grupo mixto, donde consideran que tienen mayor visibilidad. Un espacio que él mismo ya había ocupado en la anterior legislatura. De hecho, el mandato que estipulaba el protocolo del pacto y que había aprobado el Consell Nacional del Bloc dejaba claro que en caso de grupo propio fallido, el mixto sería el destino para los parlamentarios de la coalición valenciana, al margen de los de Podemos, una vez agotadas las vías judiciales. Sin embargo, el paso de los parlamentarios del partido de Pablo Iglesias al grupo de Podemos dejó a los de Compromís con sólo cuatro escaños (uno menos de los que se necesitan para al menos intentar formar grupo) y la imposibilidad jurídica de recurrir una previsible negativa de la Mesa. Quemada esa baza, en Compromís se afanaban ayer por intentar cerrar el episodio con los menores daños posibles. Aunque sobre el escenario no se descarta la posibilidad de que los dos diputados del Bloc se queden en el grupo mixto y los dos de Iniciativa se acaben incorporando en Podemos, donde se ha creado una agrupación parlamentaria valenciana que lidera Ángela Ballester. Sin embargo, ese panorama sería tanto como reconocer que Compromís se ha acabado fracturando tras la coalición fallida con Podemos.
Ayer, nadie en la coalición quería poner palabras a ese movimiento, aunque la primera en no descartarlo fue la vicepresidenta del Consell y líder de Iniciativa, Mónica Oltra. «En Compromís nada es imposible», pero apostó por que los parlamentarios se asienten en el lugar en el que tengan «más visibilidad». Pero, ¿en qué grupo se daría esa circunstancia?. Oltra no quiso aclararlo, pero en su entorno se mostraban ayer partidarios de imprimir calma a la situación antes de tomar cualquier decisión. El problema es que con el aumento del número del diputados en el grupo mixto tras la denegación del grupo para IU, esa visibilidad a la que apelan las partes quedaría incluso más diluida. De este modo, la voz valenciana referente en Madrid sería la diputada de Podemos Ángela Ballester. Algo que no gusta demasiado en Compromís.
En cualquier caso, la decisión deberá tomarse hoy en la reunión que la ejecutiva de Compromís ha convocado esta tarde. «Quiero escuchar a mis compañeros», dijo Oltra, que instó a esperar a las reuniones que se celebraran en los próximos días.
Renegociación con IU
Entretanto, el diputado Joan Baldoví reconoció ayer que estaban estudiando la posibilidad de incorporar a un quinto diputado al grupo parlamentario que aspira a conformar en el Congreso, según él mismo informó a 'Europa Press'. Compromís está valorando sumar a algún diputado para alcanzar los cinco parlamentarios que exige el Reglamento para crear un grupo antes de decidir si recurre la decisión de la Mesa. No obstante, está por determinar a quién sondear. Compromís ha estado negociando con los dos diputados de Izquierda Unida la posibilidad de sumar sus fuerzas en un grupo parlamentario propio. Ahora, pudiera darse el caso que Compromís volviera a llamar a la puerta de IU para tratar de cumplir con su pretensión de contar con una voz propia en el Congreso.
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