Una efeméride para acercar el personaje a la sociedad

De las intervenciones de los distintos representantes de las instituciones participantes en la celebración del 150 aniversario del nacimiento de Rafael Altamira se pudo extraer una conclusión final: se trata de un programa que busca acercar la figura del ilustre intelectual a la sociedad alicantina.

El rector de la UA, Manuel Palomar, recordó la labor de extensión universitaria que inició Altamira y que todavía hoy sigue vigente. «Uno de sus legados importantes fue acercar la universidad a la sociedad», apuntó. Por su parte, José Ferrándiz, director del IAC Gil-Albert mencionó una fotografía de 1911 donde una multitud recibió al humanista en Alicante a la vuelta de uno de sus viajes. «Que se llene una plaza pública para recibir a un intelectual hoy es casi imposible», indicó Ferrándiz.

Daniel Simón puso su foco de atención en resaltar los recuerdos existentes en la ciudad y, por este motivo, restaurará la placa existente en la calle Cienfuegos «para que los alicantinos le recuerden al pasar por allí». El alcalde de El Campello, Benjamí Soler, vinculó su localidad con Altamira «más allá de su finca y el tiempo que vivió allí» para hacer hincapié en que «es una figura de la cultura y de la ciencia».

Finalmente, Pilar Altamira agradeció a las instituciones la participación en el homenaje del nacimiento de su abuelo y manifestó que «tras años debajo de la losa del franquismo, todavía queda mucho de mi abuelo para recordar y que salga a la luz». Precisamente, el libro que presentó se adentra en sus antepasados y en los intelectuales que rodearon al humanista durante su vida.