Carlos Fabra sale de la cárcel en su segundo permiso y lucha por obtener el tercer grado

El expresidente de la Diputación de Castellón y exlíder del Partido Popular provincial, Carlos Fabra, abandonó ayer la madrileña prisión de Aranjuez, donde cumple una condena de cuatro años por cuatro fraudes fiscales desde el 1 de diciembre de 2014, para disfrutar de unos días de libertad tras obtener su segundo permiso penitenciario. La anterior dispensa le permitió estar cuatro días lejos de los muros de la cárcel donde ingresó hace 14 meses.

Carlos Fabra, que el pasado 2 de agosto cumplió 70 años, fue sometido en 2010 a un trasplante de hígado, por el que debe tomar «medicación muy fuerte, de por vida, y someterse a controles periódicos», señalaron a este periódico fuentes de su círculo más próximo.

Estas son las bazas a las que se aferra desde el pasado verano, y tras la entrada en vigor de la reforma del Código Penal, «para conseguir el tercer grado o, directamente, obtener la libertad definitiva; es su obsesión en este momento», indicaron las mismas fuentes.