El Lucentum pierde su identidad

Más de nueve meses después el Lucentum cayó en el Pedro Ferrándiz. Lo hizo en el día menos esperado, no solo por las ocho victorias consecutivas que acumulaba hasta ayer, sino también por el rival al que se enfrentó. El Simply Olivar -un equipo joven e inexperto que tiene como función ser filial del CAI Zaragoza- llegó a Alicante como penúltimo clasificado y después de encadenar seis derrotas. Pero el equipo joven e inexperto dominó al Lucentum durante prácticamente todo el encuentro, además gestionó mucho mejor las últimas jugadas del partido con el marcador ajustado, cuando todo se decidió.

Los locales no consiguieron sobreponerse a un día gris, en el que especialmente estuvieron desacertados sus pívots; se notó que Johan Kody jugó con molestias en la rodilla, mientras que Sherman completó su peor partido en casa con el Lucentum. Con los pívots rindiendo muy por debajo de su nivel, el equipo alicantino perdió sus señas de identidad, ya que le faltó definición sobre la pintura en ataque y en defensa se vio continuamente superado por los jóvenes jugadores del Simply Olivar. Los locales tan solo estuvieron acertados desde la línea de tres, pero no fue suficiente.

Los bases visitantes, Sergi García y Álvaro Sanz (19 y 17 años, respectivamente), dirigieron con comodidad a su equipo y lograron puntos fáciles en penetraciones por culpa del desdén defensivo lucentino. Aunque el verdadero artífice de la victoria maña fue el pívot lituano Zygimantas Riauka, que se hizo dueño de la zona y aniquiló a los locales con nueve rebotes (siete de ellos ofensivos) y 22 puntos; el lituano se exhibió delante de una defensa inoperante, que vio como una y otra vez le quitaban los rebotes debajo de su aro.

Desde el salto inicial se vio que no era el día del Lucentum. Los alicantinos no supieron encontrar el ritmo del partido y fueron inferiores al Simply Olivar. El equipo de Kuko Cruza, más nervioso de lo habitual, consiguió robar muchos balones, pero no definió en las contras como acostumbra. Así terminó el primer cuarto con victoria momentánea visitante (15-21) y con el Lucentum dispuesto a reaccionar en el segundo cuarto, como así fue.

Con el equipo carente de un juego interior fuerte, los lanzadores lo intentaron con éxito desde fuera. No está siendo la temporada del equipo alicantino desde la línea de tres, pero ayer los triples de Edu Guillén, Carlos Martínez y Adri Fuentes mantuvieron al Lucentum en el partido. El acierto desde el perímetro fue lo único que evitó que el Simply Olivar tomase más distancia en el marcador antes del segundo tiempo, al que se llegó con 36-37.

En el tercer cuarto los locales por fin despegaron. Porcher se unió a la fiesta de los triples, Bowie, desaparecido en el primer tiempo, despertó y Aramburu y Kody dieron espectáculo con sendos mates, parecía que volvía el Lucentum, pero no fue así. Las continuas pérdidas y los fallos en lanzamientos fáciles evitaron que los locales sentenciasen y dejasen el encuentro abierto hasta el último cuarto a pesar de que los alicantinos llegaron con una ventaja de cuatro puntos (55-51).

En el último cuarto se tiró todo el trabajo hecho en el tercero. El equipo de Kuko Cruza mantuvo la ventaja hasta los últimos instantes, pero la mala gestión de las jugadas finales decantó el partido del lado visitante. Con el Lucentum dos puntos arriba y 18 segundos por jugar, Aramburu hizo falta a Sanz y éste no falló desde la línea de personal. En la siguiente posesión, Fuentes fue objeto de falta pero falló uno de sus dos tiros libres y dejó a su equipo uno arriba (72-71). En los 10 segundos que quedaban, le dio tiempo a Sergi García a anotar, con poca oposición defensiva, la canasta de la victoria; era el 72-73 y ya no quedó tiempo para elaborar un último ataque.

Una derrota que complica la situación del Lucentum en la clasificación. Los alicantinos siguen siendo sextos, pero los resultados del fin de semana hacen que sus rivales cojan ventaja. El domingo tendrán la oportunidad de lavar su imagen en casa, ya que reciben en el CT al Zornotza. Pero para acabar en quinta posición al final de la liga regular y tener el factor cancha a favor hará falta algo más que ganar en casa, el equipo tendrá que dar un paso adelante a domicilio.