Eva María Lahoz
Martes, 23 de febrero 2016, 02:15
Las declaraciones de la concejal de Acción Social, Nerea Belmonte, en la última asamblea de Guanyar, en la que, según recoge el acta, se quejó de que en Urbanismo habían dejado a la «castuza» de funcionarios que trabajaban con el anterior equipo de gobierno, provocó ayer la reacción airada de la Concejalía de Recursos Humanos, que dirige Carlos Giménez, que reclamó a Guanyar que «desautorizase» a su concejal y pidió a esta «respeto hacia los empleados del Ayuntamiento».
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La concejal de Infraestructuras, Gloria Vara, también quiso declarar que estas declaraciones le parecen algo «indigno. No es admisible y manifiesto mi más contundente condena por ello». En especial, dijo, por los funcionarios de su concejalía, de quienes Belmonte, según Vara, «dejaba en entredicho que no son de fiar». Para la socialista, «son servidores públicos y se merecen todo el respeto».
Tampoco los sindicatos ocultaron su indignación. El SEP, uno de cuyos delegados ha llevado ante los tribunales precisamente prácticas de acoso sindical en Acción Social, llegó a hablar de «caza de brujas» de funcionarios por parte del tripartito, en función de su adscripción «político-sindical».
«Desde que ha llegado el tripartito, han aparecido en algunas concejalías comisarios políticos que se dedican a aconsejar a una parte del tripartito que destituya a personas que ocupan puestos de responsabilidad por el mero hecho de no ser de su cuerda político-sindical, al mismo tiempo que están creando puestecitos a medida y reubicando a personas a dedo bajo el único criterio de ser de su cuerda», denunciaron ayer.
Sobre las palabras de Belmonte, señalaron que «no admitimos tal insulto y exigimos una disculpa pública». Lo mismo que le piden desde UGT. Reclaman a Belmonte que «se retracte o dimita» porque lo que ha dicho es «una absoluta falta de respeto hacia el personal del Ayuntamiento».
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«Se ha sacado de contexto»
Sin embargo, Belmonte justificaba ayer que sus palabras «se han sacado de contexto» y que «nunca» ha llamado «'castuza' a los funcionarios del Ayuntamiento en general, sino a los que están imputados en casos de presunta corrupción, que estaban en Urbanismo y han trasladado primero a Acción Social y después a Igualdad».
La concejal de Acción Social, que ayer pidió disculpas por medio de un comunicado, asegura que siente «un profundo respeto por los funcionarios y por su gran labor», que ella comprueba «día a día en mi concejalía». Apunta que siempre ha tomado las decisiones contando con todos ellos y que ni siquiera sabe «de qué sindicato es cada uno, porque no me interesa».
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