El Consell presupuestará en 2017 las obras del túnel de la Serra Grossa

Las actuaciones en el túnel de la Serra Grossa para el TRAM se reactivarán el próximo año. Así lo anunció el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, durante la sesión de control parlamentario celebrada ayer, en respuesta al síndico del grupo parlamentario de Ciudadanos, Alexis Marí, que denunció que «el Consell no ha sido capaz de invertir en el TRAM de Alicante lo suficiente».

Marí, en su pregunta al jefe del Conselll, calificó de «vergüenza» y «tercermundista» la situación en que se encuentra el TRAM de Alicante, al que «le cuesta una hora y 45 minutos ir de Altea a Alicante, cuando en coche el trayecto dura apenas 40 minutos, y no cuenta con conexión con el aeropuerto de El Altet, a pesar de que es uno de los que más turistas recibe de toda España».

Puig aseguró que esa situación «se va a acabar el próximo año», y se comprometió a «a incluir una partida lo suficientemente amplia en los Presupuestos de 2017 para que el túnel de la Serra Grossa esté en funcionamiento lo antes posible, lo que supondrá un impulso definitivo al TRAM y a las comunicaciones ferroviarias por la costa».

No cuantificó cuánto se destinará a la conclusión del túnel de la Serra Grossa, al depender de los informes técnicos que se están realizando, si bien será el coste de toda la infraestructura para el funcionamiento del TRAM, que es lo que queda pendiente, una vez terminada en 2013 la obra civil, es decir, señalización, vías, electrización y medidas de seguridad.

El jefe del Consell responsabilizó de la parálisis del túnel de la Serra Grossa al anterior gobierno del PP, «que priorizó los grandes proyectos, y otros intereses, a mejorar las comunicaciones metropolitanas de la provincia de Alicante».

A este respecto, el presidente apostó por revitalizar las comunicaciones del área metropolitana Alicante-Elche anunciando que a lo largo de este año «se va a elaborar un plan de movilidad de todo el área con la participación de los ciudadanos y de las instituciones que agilicen las comunicaciones de toda la zona». Dicho plan, según explicó, contemplará todo tipo de acciones, desde rutas cicloturísticas, autobuses, ferrocarriles y tranvía, según lo más viable para cada trayecto.

Además, el jefe del Consell anunció la renovación del convenio de la línea 23 de autobuses entre Alicante y Mutxamel, tal y como había demandado el Ayuntamiento, así como la renovación de las concesiones de las líneas de transporte interurbano de autobuses pendientes desde hace años, ya que «los anteriores gobiernos del PP las sacaron a licitación».

Por otra parte, la consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador, anunció ayer en Les Corts, la intención de solicitar al Gobierno central «la gestión de los ferrocarriles de Cercanías, igual que sucede en Cataluña y Madrid con la correspondiente partida económica para su explotación».

Salvador explicó que «la gestión directa de las Cercanías supondrá un mejor servicio y más eficaz para el ciudadano, y permitirá una mejora de servicios ferroviarios para los ciudadanos». Para ello, según la consellera, desde el ejecutivo valenciano se considera que esta cesión de la gestión debe ir acompañada de 200 millones de euros para mejoras de la red de Cercanías, así como la construcción de la línea Dénia- Gandía, que supondría la conexión ferroviaria de la costa entre Valencia y Alicante.