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JUAN PABLO LAORGA
Lunes, 7 de marzo 2016, 00:32
Para triunfar en el fútbol hace falta perseverancia, trabajo y una pizca de suerte... siempre que seas un hombre. Si quieres tener éxito en el fútbol femenino y eres española necesitas aún más perseverancia, más trabajo y mucha más suerte, además de encontrar el equipo idóneo para triunfar. Eva Navarro lo ha encontrado en Alicante, a 90 kilómetros de Yecla, su hogar, pero eso no impide que esta joven jugadora del Sporting Plaza Argel renuncie a su sueño de ser futbolista profesional.
tantos anotó con el Pinoso en una liga en la que era la única chica.
años tenía cuando entrenó por primera vez con el primer equipo.
Eva, delantera que cumple su tercera temporada en el SPA, recorre 180 kilómetros tres días a la semana para ir a entrenar al campo de Divina Pastora, y otro día más para jugar los partidos: «Mi padre me trae a Alicante. El recorrido dura una hora y llegamos a casa a las 12 de la noche. Cuando llego, hago lo que me queda por hacer y me acuesto. Por la mañana tengo clase de ocho y cuarto a dos y cuarto. Por la tarde me da tiempo a estudiar y a entrenar». El padre de Eva, Cayetano, apoya a su hija aunque eso implique conducir casi mil kilómetros a la semana: «Aprovechamos los viajes para hablar. Comentamos que estamos haciendo un sacrificio muy grande, pero yo hago esto porque ella quiere, no hay ninguna obligación».
El sacrificio está mereciendo la pena. La carrera de esta joven futbolista está cogiendo velocidad día a día y la selección española ya se ha fijado en ella. En enero, cuando todavía tenía 14 años, fue convocada por la selección sub-16 para realizar una concentración y quedaron encantados con ella. Tanto, que desde hoy y hasta el miércoles la delantera yeclana estará en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas en su segunda concentración con España: «Ir con la selección fue una experiencia inolvidable. De momento, me han dicho que me haga el pasaporte porque en primavera se jugará un torneo en Portugal y tengo que estar preparada por si me vuelven a convocar».
Además, Eva también tiene experiencia con la selección sub-16 de la Comunidad Valenciana, ya que, aunque ella es de Murcia, juega con el combinado de la federación a la que pertenece su actual club. En pocos partidos ya se ha convertido en fija en las convocatorias con la Comunitat; en su debut anotó el tanto de la victoria ante Cataluña, una de las selecciones más fuertes, mientras que, en su último encuentro, marcó dos goles a Galicia.
Debut precoz
Su calidad ha provocado que debute en Segunda División con el SPA en febrero nada más cumplir los quince años, la edad mínima para competir en esta categoría. En su primer partido, salió desde el banquillo y dejó muy buenas sensaciones, pero en el segundo fue más allá. Jugó como titular, anotó su primer gol en Segunda y el SPA goleó al Al-Basit con un contundente 8-1.
Antes de debutar con el primer equipo, Eva jugaba con el filial en Liga Autonómica, una competición en la que se lucha por ascender a Segunda y en la que las chicas son más mayores que ella. Aun así, el filial del SPA ocupa la segunda plaza gracias, en parte, a los 17 tantos de la yeclana en la primera vuelta.
Y es que Eva es una goleadora desde el primer partido que jugó en su vida, con cinco años: «Me enteré de que en un colegio de Yecla habían hecho un equipo de chicas y fuimos a preguntar, pero el campeonato era solo entre las aulas del colegio. Eva iba con la equipación de la selección, las botas de fútbol y era muy pequeñita. Entonces se puso a llorar y los padres, al verla, dejaron que jugase. Cuando la vieron moverse me pidieron que la llevase al siguiente partido, porque jugaban cada fin de semana contra niños y siempre perdían de muchos goles. Llevé a Eva a jugar, ganaron 5-4 y ella metió los cinco goles», cuenta su padre.
Desde entonces, la delantera no ha parado de marcar hasta llegar al Sporting Plaza Argel, equipo que eligió a pesar de la distancia porque es el club en el que vio que mejor podría desarrollar su carrera. Fue Jesús Cañizares, presidente del club amarillo, quien se fijó en ella. Por aquel entonces, Eva Navarro fue la máxima goleadora de una liga en la que era la única chica. Anotó 45 goles con el Pinoso, por lo que equipos más grandes contactaron con ella. «El Elche nos estuvo llamando durante un mes para que jugase allí. Incluso nos invitaron a ver un partido de Primera contra el Athletic en el Martínez Valero, pero ella prefirió el SPA», recuerda su padre. Eva llegó a jugar tres partidos con las franjiverdes, pero tras conocer los dos clubes decidió que su futuro estaba en el equipo amarillo: «Elegí el SPA porque vi a la gente muy unida, en Elche también hay muy buena gente, pero aquí vi algo diferente».
A Eva todavía le queda un largo camino por recorrer para llegar a ser profesional, pero ella es especialista en distancias largas. Además lo tiene claro, si un día tiene que salir de España para triunfar, lo hará. Igual que ha hecho su ídolo, Vero Boquete.
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