Dos arrestados por su presunta relación con un alijo de 800 kilos de marihuana

Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad han dado con uno de los mayores alijos de marihuana en lo que llevamos de año en la zona del Levante español. La Guardia Civil interceptó esta semana un camión cargado con marihuana, hasta 800 kilos de este tipo de sustancia, en una operación contra una red de narcos asentada en Murcia pero que también cuenta con ramificaciones en la provincial de Alicante. Por ello, los investigadores han arrestados a dos presuntos compinches de la trama en suelo alicantino, tal y como informaron ayer fuentes cercanas al caso.

Los agentes del Instituto Armado llevaban tiempo detrás de los sospechosos, tal y como se desprende de las diligencias, que, por el momento, se encuentran secretas. Sin embargo, y conocedores de que la banda tenía planeado mover el vehículo industrial cargado con 800 kilogramos de 'maría', decidieron lanzar el operativo para interceptarlo y apresar a los responsables del alijo.

Las pesquisas han llevado a los investigadores hasta dos posibles contactos del entramado en Alicante. Al parecer, los agentes de la Benemérita controlaban los teléfonos de los principales sospechosos, según detallaron las fuentes jurídicas consultadas, escuchas que les han permitido localizar al resto de conexiones de los traficantes fuera de la Región de Murcia.

Los dos detenidos en suelo alicantino pasaron ayer por el juzgado de guardia del Palacio de Justicia de la capital para prestar declaración por su presunta relación con el abultado alijo de droga. La juez titular de Instrucción 2 decretó el ingreso en prisión comunicada y sin fianza, a instancias del Ministerio Público, para uno de ellos. Así lo confirmaron ayer fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), quienes informaron de que el otro arrestado quedó en libertad.

No obstante, el sujeto, pese a quedar liberado mientras se instruye el asunto, seguirá investigado en las diligencias por esta causa que se encuentra abierta por un delito contra la salud pública en cantidad de notoria importancia.

La intervención de este alijo de casi una tonelada oculto en el vehículo en Lorca no resulta novedosa, pues las carreteras murcianas y alicantinas sirven de conducto para los narcos que pretenden trasladar la droga desde el norte de África hacia el mercado europeo pasando por nuestro país. De hecho, es habitual que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad organicen dispositivos para luchar contra estos delincuentes que se valen de empresas de transporte para mover el hachís.

Los traficantes tratan de esconder en dobles fondos y entre las mercancías de los camiones las sustancias ilegales con las que luego obtendrán pingües beneficios con su venta en España y en países como Reino Unido u Holanda, dos de los destinos habituales de la mercancía ilícita.