Salud Pública prohíbe beber agua del grifo en el Hospital de La Vila al «no ser apta»

Pacientes y sanitarios del Hospital de La Vila tienen prohibido beber agua del grifo hasta nueva comunicación. Una muestras realizadas han revelado que no es apta para el consumo humano y la gerencia, tras ponerse en contacto con Salud Pública, ha aplicado esta medida preventiva que le ha recomendado el organismo dependiente de la Conselleria de Sanidad. «Les informamos que hasta nueva comunicación el agua no es apta para el consumo humano». Esta es el aviso que ha hecho la directora gerente del departamento, Rosa Louis.

Según explicaron ayer desde Sanidad, un tratamiento contra la legionela ha obligado a tomar la medida. Aunque no pudieron precisar las fechas, al poco tiempo de que la directora tomara posesión de su cargo, -fue nombrada a finales del pasado año- se detectó la bacteria en uno de los controles periódicos que realizan. El hospital es un edificio antiguo, por lo que deben reforzarse las revisiones. Para eliminar la bacteria en los sistemas de conducción del agua del centro se realizó un tratamiento basado en varias sesiones de hipercloración hasta que en las muestras se comprobó que ya no existía rastro.

Desde Sanidad destacaron que durante este tiempo «en ningún momento» hubo riesgo para los pacientes, y ante los resultados de las muestras, Salud Pública ha prohibido que, por el momento, no se utilice como consumo por la cantidad de productos químicos que se han aplicado.

Las citadas fuentes insistieron en que los pacientes no suelen consumir agua del grifo, siempre tienen una botella de agua en la habitación y aunque bebieran como no serían grandes cantidades tampoco supondría un riesgo para su salud. Aun así, han preferido informar a los usuarios y poner cartelería por el centro para quienes utilicen los servicios.

Desde Sanidad no pudieron precisar cuánto tiempo se prolongará la medida porque siguen realizando análisis y los últimos han sido remitidos a Valencia debido a la festividad de las Hogueras en Alicante.

La delegación del Sindicato de Enfermería en el hospital (Satse) confirmó ayer que el pasado miércoles, sobre las dos y media de la tarde, se obtuvieron los resultados de las muestras y tras solicitar información a Salud Pública se ha prohibido su consumo en los aseos y en los cuartos de baños de las habitaciones donde están ingresados los pacientes. El sindicato envió ayer un escrito a la gerencia para que les informe de la situación ya que se desconocen cuánto puede prolongarse esta medida preventiva y qué se ha encontrado en el agua. Según recordaron, las tuberías del centro son metálicas y «viejas», de hace 30 años. De manera frecuente se toman medidas para erradicar un posible foco de legionela. «Normalmente hacen una hipercloración por la legionela que es un tema que preocupa; no sabemos si los productos químicos que echan han podido producir una alteración, se tendrá que esperar, pero las primeras muestras han aconsejado que se cierren los grifos como medida preventiva», señaló Luis Gimeno, del Satse.