El trabajo de inspección permite detectar el triple de alquileres turísticos irregulares

El trabajo coordinado de los inspectores de la Dirección General de Turismo con la Policía Autonómica, la Inspección de Trabajo y Seguridad Social y la Agencia Tributaria ha multiplicado por tres la localización de apartamentos irregularmente alquilados en la Comunitat Valenciana este año.

La persecución de estas prácticas es uno de los grandes objetivos que se ha fijado la Generalitat, aunque advierten de que no se pueden destinar más medios a las inspecciones y discrepan de la opinión de los hoteleros acerca del peso real que tienen en la pérdida de negocio para los establecimientos reglados.

La directora general de Turismo, Raquel Huete, explica que «se ha detectado ya un 300% más de apartamentos irregularmente alquilados» y añade que «vamos a seguir en esta línea porque nuestro decreto que regula el alquiler es bueno y ejemplo para otras autonomías».

El presidente de la patronal hotelera principal de la Comunitat, Hosbec, Antoni Mayor, lleva muchos meses subrayando la necesidad de controlar el alojamiento irregular de apartamentos. El pasado día 3 fue más allá y culpó al Ayuntamiento de Benidorm y a la Generalitat de estar consintiendo la economía sumergida, lo que, en su opinión, «impidió en julio llegar al 96% o el 97% de ocupación».

Sin embargo, Huete discrepa tanto de la visión de Mayor, que achacó al alojamiento ilegal en exclusiva el retraimiento en julio del mercado nacional, como de la patronal Provia, que alerta de que los apartamentos sin registrar y cada vez más alquilados irregularmente frenen un tercio las ventas de segundas residencias en la Costa Blanca.

«Vamos a seguir persiguiendo estos alojamientos, pero nuestros medios son los que son y no podemos contratar a más inspectores y, además, puede ser que haya más gente ocupando un mismo apartamento», explica.

Por otro lado, califica de «mentira» el argumento de Provia y de la Plataforma Salvemos el Alquiler Turístico que dirige Jesualdo Ros, gerente a su vez de la patronal inmobiliaria, sobre el posible éxodo a otros destinos turísticos del Mediterráneo de un tercio de las ventas si no se regula mejor el alquiler de apartamentos. «Construir casas no es turismo, solo si se da un uso turístico a éstas, con todas las obligaciones y deberes», insiste.

Según los datos que maneja Turismo, las voces de alarma que los primeros días de agosto lanzó el presidente de Hosbec sobre el retraimiento del mercado español en julio, en plena campaña turística alta, lo que evitó que se superara el 92,7% de ocupación de las 40.000 plazas disponibles en Benidorm, se ven difuminadas en agosto. Al menos, parcialmente.

Huete asegura que «el lleno es total» desde la segunda semana del mes y, sobre todo, en este 'puente'. Lo atribuye a la venta de última hora, «porque, aunque queda alguna plaza libre, veo a los empresarios muy contentos los últimos días», añade.

Desde que acabaron las minivacaciones de Semana Santa, Benidorm ha perdido unas 330.000 pernoctaciones de clientes nacionales. No ha habido quincena analizada por la patronal Hosbec en sus informes de coyuntura que no haya dado cifras de caída, con un promedio acumulado del 8%.

La planta hotelera de Benidorm cerró julio con un 92,7% de ocupación, lo que supone un 1,9% más que el año anterior. «Pero podríamos estar hablando del 96% o el 97%, es decir, de todo vendido y ocupado, de no ser por la reacción del mercado nacional», dijo el pasado día 3 Toni Mayor.

Mejora de última hora

Esta situación, sin embargo, ha cambiado a mejor desde el lunes día 8 de agosto. Desde la segunda semana y, en especial, la tercera, la venta se ha animado entre las centrales de reservas de los hoteles, las agencias privadas y las plataformas digitales, lo que está aumentando la contratación de última hora, la tabla de salvación para garantizar una mejor rentabilidad del verano.

«Estos últimos días veo optimistas a los hoteleros con los que hablo a diario. Aunque aún quedan plazas libres en algunos establecimientos, en general se puede hablar de un lleno total y creo que nuestra campaña publicitaria en España está contribuyendo a ello», añade Huete, la que habla de un 94% de ocupación en Benidorm, un 1% más que 2015.

Además, informa de que el resto del litoral de la Costa Blanca, con destinos tan importantes como Torrevieja, Orihuela, Guardamar, Santa Pola, El Campello, La Vila, Altea o Dénia, acabará agosto con una ocupación del 80%, lo que permite hablar de un fuerte y firme repunte del 6,9% de ocupación respecto a agosto del año anterior.

También está funcionando mucho mejor que el pasado año el turismo de interior, con una oferta de plazas muy poco representativa aún, pero que suma a este ejercicio positivo. «Estos hoteles y casas rurales de interior están al 70% de plazas vendidas en Alicante, lo cual significa un 19% más que el año anterior y aquí sí es decisivo el mercado nacional», arguye Huete.

La directora aboga por mejorar a futuro la rentabilidad del sector hotelero pero no a costa de «llenar por llenar plazas, porque eso normalmente redunda en bajada de la calidad del servicio».