La acumulación de insectos permitió localizar el cadáver de la mujer asesinada

La denuncia que presentaron los vecinos por la acumulación de insectos permitió a la Guardia Civil localizar el cuerpo de Johana, la mujer de 32 años cuya pareja ha confesado su muerte en Torrevieja. El miércoles, los agentes llevaron a cabo una investigación de todos los cuartos comunes del edificio en el que residía la familia, situado en el número 41 de la calle Ramón y Cajal, hasta que sobre las 12.30 horas hallaron el cadáver.

Así lo confirmaron ayer los subdelegados del Gobierno en Alicante, Juan Antonio Gómez, y en Valencia, Juan Carlos Valderrama, en las concentraciones celebradas en las sedes de ambas instituciones para guardar un minuto de silencio para condenar este caso de violencia doméstica, el quinto en la Comunidad Valenciana en lo que va de año y el que suma 29 en España, a los que hay que sumar otros 6 posibles casos que están bajo investigación.

Los agentes localizaron el cuerpo de la mujer junto al cuadro de contadores, ubicado bajo la escalera y cubierto con cemento, del edificio en el que vivía con sus dos hijos pequeños -que tienen 5 y 12 años- y el detenido, un hombre de 37 años de nacionalidad chilena que tras ser arrestado como presunto autor de la muerte admitió los hechos. El cuerpo estaba en avanzado estado de descomposición y, pese a que el presunto homicida construyó un sarcófago para ocultarlo, los malos olores y la afluencia masiva de insectos sembraron la alarma entre los vecinos y señalaron el camino a los investigadores para esclarecer el paradero de Johana.

A mediados de junio una amiga fue la primera que denunció su desaparición y desde entonces familiares y allegados habían realizado una intensa campaña para intentar localizarla tanto a través las redes sociales como mediante la colocación de carteles por toda la población con su foto y una detallada descripción de sus rasgos.

Según el Coronel Jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Alicante, Manuel Muñoz, el hombre ha confesado que discutieron, que la empujó y que ella se golpeó. No obstante, será la autopsia la que determine la causa final de la muerte puesto que «visualmente» el cuerpo no presenta signos de violencia.

El responsable de la Guardia Civil ha explicado que el detenido, que ayer seguía a la espera de pasar a disposición judicial, ha llevado una vida normal estos dos meses y ha atendido en todo momento a los requerimientos de los agentes.

Ambos subdelegados explicaron que no existía ninguna constancia de que se hubiera presentado una denuncia previa por violencia de género un extremo que también fue confirmado ayer por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) en un comunicado: ««No constan antecedentes de malos tratos en el seno de la pareja y no existen denuncias previas en España».

La desaparición de la mujer estaba siendo investigada por el Juzgado de Instrucción 4 de Torrevieja, que fue el encargado de proceder el pasado miércoles al levantamiento del cadáver después de que agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil lo encontraran en el edificio donde residía con su familia.

La causa está declarada secreta y el titular de Instrucción 4 de Torrevieja se ha inhibido en favor del Juzgado de Violencia Sobre la Mujer de la localidad. La nota de prensa remitida por el TSJCV dice que el detenido «pasará a disposición judicial en los próximos días», si bien fuentes conocedoras del caso apuntaron la posibilidad de que lo hiciera ayer mismo. Al cierre de la edición, no había novedades al respecto.

En relación con los dos hijos menores del matrimonio, las autoridades tendrán que decidir ahora con quiénes se quedan, ya que hay familiares en España tanto de la madre como del padre.

La vicepresidenta del Consell y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, confirmó ayer que los dos menores han quedado bajo la protección de la Generalitat mientras se evalúa su situación y se confirma si algún familiar va a hacerse cargo de ellos.

El municipio de Torrevieja, donde Johana estaba afincada desde hacía tiempo, celebró también ayer una concentración silenciosa en repulsa por este crimen, a la que ha asistido, entre otros, la madre de la víctima. Según fuentes del Ayuntamiento de Torrevieja, familiares y amigos de Johana recaudaron en su día fondos para que su madre viajara de Chile a la localidad alicantina con la finalidad de que participara en su búsqueda, ya iniciada con anterioridad a su llegada y en la que se habían distribuido carteles con la imagen de la mujer por la ciudad.