R. A.
Martes, 30 de agosto 2016, 01:06
El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, dijo ayer que en las próximas semanas los edificios, equipos y la red de repetidores de la desaparecida Radiotelevisión Valenciana (RTVV) pasarán a manos de la Generalitat, que recuperará su gestión y su propiedad, al tiempo que aseguró que se pretende que las instalaciones de Burjassot sean «un centro de comunicaciones de la Comunitat».
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Puig adelantó que para ello se va a ofrecer la posibilidad de que «otras televisiones, como TVE, puedan instalarse en el conjunto de este centro de comunicación que quiere ser el nuevo centro de producción de Burjassot, con capacidad de ampliación alrededor de este edificio».
El jefe del Consell escenificó su llegada a RTVV sin que Les Corts hayan retomado aún las negociaciones. Durante su visita a las instalaciones del centro de producción de RTVV en Burjassot, Puig se reunió con los liquidadores del ente para conocer este proceso y el estado de estas dependencias.
El presidente de la Generalitat destacó que «hay que tener en cuenta siempre que cuando se habla de la recuperación de Canal 9, es un elemento fundamental la recuperación de la RTVV», pero también que «se ha de ir más allá» porque «necesitamos un espacio comunicativo valenciano potente».
Otras televisiones
Ximo Puig en ningún momentos especificó cuándo se pondrá en marcha la nueva televisión autonómica, limitándose a indicar que será «del modo más rápido posible». «Estamos hablando de todo el ecosistema informativo y comunicacional de la Comunitat Valenciana y por eso estas instalaciones han de tener la referencia y la capacidad de poder incluir otras televisiones como TVE», dijo.
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Asimismo, agradeció el «gran trabajo» que están realizando los liquidadores y su labor «en favor del interés general de los valencianos», para «ahorrar mucho dinero» público y lograr «un ahorro sustancial», que no precisó
Resaltó que «aun estando cerrada RTVV se estaban pagando trabajos que no tenían razón de ser como una limpieza desmesurada, actividades de jardinería» o el mantenimiento del «centro de programación de Canal 9 en Alicante», del que recordó que costaba 35.000 euros al mes.
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Ximo Puig dijo que los liquidadores han manifestado «la situación de desconcierto, de falta de control absoluto» y de «despilfarro» en el funcionamiento del este ente público en los últimos años, a la vez que ha destacado que «aún quedan cosas por aclarar». Valoró la tarea de estos profesionales para ir «superando» esas cuestiones con «una buena gestión y voluntad».
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