Detenidos por robar 11.700 euros en una chocolatería del aeropuerto

La Guardia Civil de Alicante ha detenido a una pareja por el robo de 11.700 euros, la caja de una chocolatería situada en la zona restringida de seguridad del aeropuerto de El Altet. Los detenidos son un hombre de 37 años y una mujer de 36, y se busca a un tercero de 33 años, sobrino del detenido, como presunto autor material de los hechos.

Según la Comandancia, el robo se produjo el pasado 17 de julio en uno de los establecimientos del aeropuerto y los ladrones lograron sustraer la recaudación de todo el fin de semana, más de 11.700 euros. El autor logró eludir las cámaras de seguridad al llevar puesta una gorra que le ocultaba la cara. La ropa que llevaba puesta en las grabaciones no se correspondía con ninguno de los empleados ni de los pasajeros que accedieron ese día al aeropuerto.

Tras estudiar los detalles del caso, los investigadores de la Guardia Civil descubrieron que el presunto ladrón tenía que conocer detalles internos del funcionamiento del local, ya que no había forzado la cerradura de la caja donde estaba el dinero. Aunque las pesquisas se centraron primero en empleados del local o del propio aeropuerto, tras el visionado de las cámaras los agentes sospecharon que el autor había accedido a la zona de seguridad utilizando un billete de avión. La Oficina de Análisis e Investigación de Seguridad Aeroportuaria (ODAISA) de la Guardia Civil realizó gestiones con las compañías aéreas, con varias agencias de viajes de Alicante y con otros sistemas de seguridad del aeropuerto y pudo determinar la identidad del autor material de los hechos. Se trata del sobrino del excompañero de una antigua trabajadora del local, y entre los tres planificaron el robo comprando un billete con destino a Barcelona, que nunca llegó a utilizarse.

Una vez identificados los presuntos autores, se ha detenido a dos personas de nacionalidad colombiana, un hombre de 37 años y una mujer de 36, y se busca al autor material, sobrino del detenido de 33 años de edad, que burlar el control de accesos y la vigilancia de las cámaras tras cambiarse de ropa en los aseos y colocarse una gorra.