Buscan un tercer vehículo que huyó de La Granadella tras una deflagración

La sombra de los fuegos persiste en la Marina. Un nuevo incendio amenazó La Granadella ayer de madrugada mientras los efectivos de extinción se encontraban trabajando. Brigadas forestales de la Generalitat se extrañaron de la llegada a la zona de un coche de alta gama, un BMW Serie 5, y de cómo unos minutos después, el conductor del vehículo abandonaba el lugar con rapidez. Aunque lo que realmente no esperaban es que de inmediato surgiese una llamarada justo al lado de la masa forestal que trataban de evitar que acabase calcinada. Por lo que se afanaron en apagarla, regresar al Puesto de Mando (PMA) y trasladar a la Guardia Civil lo ocurrido. De hecho, pese a que el coche estuvo poco tiempo en el área de La Granadella, pudieron recordar la matrícula para que los agentes de la Benemérita y Seprona investiguen lo ocurrido.

También la Guardia Civil sigue en la búsqueda de los dos coches, una ranchera de color gris plata y otro granate, ya que ambos vehículos estuvieron en el lugar y hora en la que el domingo se inició el incendio de Benitatxell, en Cumbres del Sol. La zona, que se ha comprobado que estaba repleta de colillas, ha hecho que la investigación dé un giro y se decante por la negligencia debido a unas colillas como la causa del incendio que arrasó más de 800 hectáreas, incluido el paraje forestal de la Granadella.

Fuentes del Instituto Armado explicaron que el segundo foco del fuego se produjo muy cerca del primero y podría haberse iniciado por las pavesas de los árboles que acaban convirtiéndose en cenizas arrastradas por el fuerte viento de poniente que soplaba el domingo. De esta forma, comentaron, se explica la existencia de otros muchos pequeños focos que alertaron a toda la población y que iban produciéndose en función de la dirección del viento.

Respecto al fuego del Saladar, situado a unos tres kilómetros de Cumbres del Sol, tampoco se descarta que fuese una negligencia por una colilla ya que varios vecinos declarado que en ese lugar se reúnen de forma habitual grupos jóvenes y suelen fumar.

Estas líneas de investigación se expusieron ayer en la reunión que se llevó a cabo entre las policías locales de Xàbia y Benitatxell, Guardia Civil y el Seprona, tras el pertinente estudio de toda la documentación, vuelos aéreos y fotografías de las zonas afectadas por el fuego que obra en manos de las fuerzas de seguridad. El incendio seguía ayer sin darse por controlado, aunque sí estaba estabilizado al igual que el de el vertedero de residuos verdes de Ramblars. El Ayuntamiento de Xàbia ha decidido cerrarlo y está buscando un solar alternativo para que se puedan depositar los restos de jardinería, pero no estará habilitado hasta la próxima semana.

Respecto a los hidrantes utilizados en las labores de extinción del incendio el responsable del parque comarcal de bomberos apuntó que han funcionado en general muy bien, pues la red que posee Xàbia, con más de 400, es «una de las mejores de la Marina Alta». Y Benitatxell cuenta con un dispositivo de 81, que están señalizados con GPS.