C's exige eliminar el Puente Rojo y tramitar Ikea para apoyar las cuentas

El tripartito se juega mañana sacar adelante los presupuestos con la abstención de C's. El grupo municipal aceptó ayer una reunión para abordar las cuentas y plantear las modificaciones que consideran necesarias. Se celebrará mañana y acudirán el alcalde, Gabriel Echávarri, la concejal de Hacienda, Sofía Morales, y la portavoz de C's, Yaneth Giraldo.

La edil había pedido que acudiesen los 14 concejales del equipo de gobierno, para explicar, uno a uno, las partidas de sus respectivas áreas. Sin embargo, el alcalde consideró que con él y la responsable de Hacienda era suficiente y finalmente Giraldo aceptó el cambio.

La cita se concertó ayer, en una llamada telefónica que realizó Echávarri a Giraldo para, tal y como se comprometió el jueves, pedirle su colaboración en la tramitación de los presupuestos.

Se trata, sin duda, de un paso adelante, después de que a finales de la semana pasada se diesen por rotas las negociaciones. Sin embargo, el tripartito no va a tenerlo fácil.

Y es que ayer C's ya avanzó que va a exigir, además de modificaciones presupuestarias, algunas medidas de diversa índole para dar su abstención. Entre otras, mencionaron que exigirán al tripartito que siga con los planes originales de Avant para los terrenos del soterramiento y el parque central, que incluían la eliminación del Puente Rojo que ahora Urbanismo quiere conservar.

También reclamarán que Urbanismo se comprometa a agilizar la concesión de licencias, a tramitar cuanto antes un plan para permitir que Ikea se instale en Rabasa y a garantizar los usos industriales del puerto.

Abordarán, por otro lado, la «indefinición» del tripartito en torno a la gestión de los servicios públicos, es decir, a las grandes contratas.

Giraldo aseguró ayer que acudirá a la reunión «para ver si existe la posibilidad de establecer algún tipo de diálogo», aunque ya advirtió de que no va a ser fácil.

Destacó que C's «en ningún momento ha estado taponando ninguna vía de diálogo» y lamentó que Echávarri diera por rotas las negociaciones el pasado día 8 de diciembre, y «que haya tardado todo este tiempo en ponerse en contacto con C's mientras que se dedicaba a lanzarnos mensajes, incluso insultos, a través de los medios de comunicación» Considera que esto demuestra «falta de modales y un cierto déficit democrático».

Subrayó que la cita de mañana «no garantiza que el voto de C's vaya a ser la abstención».