El Deportivo se mantiene con vida

Mario Cartagena, cuarto técnico en lo que va de campaña, cumplió lo que prometió en la víspera, su Eldense de dejó el alma para certificar una milagrosa victoria frente al Prat, rey del empate en este grupo tercero de segunda B. El joven técnico eldense, de apenas 26 años, que tuvo que dirigir al equipo desde la grada, se sobrepuso a toda clase de contratiempos, fue más valiente que ninguno de sus antecesores y salió del campo ovacionado por una hinchada entregada a la causa.

En la resolución positiva de este épico triunfo hubo un factor determinante: la exhibición del guardameta Carlos Molina, inconmensurable bajo palos, quien impidió que los visitantes pudieran forzar las tablas. De principio, Cartagena apostó por un once valiente con la alineación de hasta 5 futbolistas de Elda. Por lo demás ubicó a Chema Antón como pivote defensivo, escoltado por Mario y por el debutante Maiki Fernández, dejó a Juanjo en el carril del «10» y habilitó a Cañadas como segundo punta y con libertad de movimientos. El manual de Cartagena está basado en la posesión y el Deportivo optó por jugar al toque con escasos pelotazos.

Durante los primeros minutos, el Prat, por medio de Poves, sembró la incertidumbre con acciones individuales que no hallaron premio. Paulatinamente, al Eldense se le vio mejor, con buenas asociaciones y con dificultades para aproximarse a los dominios de Toni Teixeira. Entonces emergió la veteranía del capitán Antonio Cañadas para provocar una pena máxima que el murciano transformó magistralmente en el único tanto del compromiso. Dolera, míster catalán, varió de formato y a partir de ahí, asediaron la portería eldense con ocasiones por doquier que Ernest Forgás y Alejandro Poves malograron. Cartagena apeló a las sustituciones para refrescar a los suyos y el sufrimiento se hizo casi insoportable en los minutos finales, en los que tres espectaculares intervenciones de Carlos Molina evitaron el empate y provocaron la euforia en las filas locales.

Llegó el silbido final y Mario Cartagena no pudo contener su júbilo. El Eldense ganó en su debut como primer técnico del equipo. A sus 26 años es el preparador más joven de la categoría. A partir de aquí, el fondo de inversión dirá. En Elda no tiran la toalla.