Detenida por robar joyas en las viviendas donde trabajaba como empleada del hogar

Una mujer de 62 años, sin antecedentes y de nacionalidad española, ha sido detenida en Elda por presuntamente hurtar joyas y dinero en las viviendas donde se encontraba trabajando como empleada del hogar. Según ha informado la Policía Nacional, habría estado cometiendo los robos de forma continuada durante varios años después de ganarse la confianza de sus víctimas.

Fue una mujer de 76 años la que interpuso una denuncia en la comisaría de Policía Nacional de Elda en la que manifestaba que echaba en falta una cantidad de joyas "considerable" y que no había observado ningún síntoma de robo en su casa. La anciana indicó que sospechaba de la mujer que tenía contratada como empleada del hogar ya que, aunque no disponía de llaves para acceder, sí que contaba con su completa confianza para quedarse sola en el domicilio.

Tras comprobar los hechos, los agentes detectaron una ingente cantidad de venta de joyas por parte de la investigada, que se remontaban hasta el año 2017.

Una vez detectado tal indicio, los investigadores elaboraron un minucioso álbum con fotografías de todos los objetos sustraídos y se lo mostraron a la víctima, quien reconoció algunas de sus pertenencias.

Los policías intervinieron todas aquellas joyas que aún eran recuperables y pudieron entregarle a la víctima parte de las que le fueron sustraídas. Sin embargo, averiguaron que la investigada trabajaba en la actualidad en más domicilios como empleada y que la venta de joyas seguía siendo "bastante considerable".

Así las cosas, mostraron nuevamente las fotografías a estas presuntas nuevas víctimas y todas ellas llegaron a reconocer algunas de sus pertenencias en el álbum, aunque ninguna había presentado denuncia, bien porque no habían detectado su falta al no usarlas, bien porque pensaron que no las encontraban por despiste personal.

Tras el registro en la vivienda de la detenida, la Policía logró recuperar una gran cantidad de joyas y 2.200 euros en efectivo. Según fuentes policiales, con la venta de los objetos robados podría haber obtenido cerca de 15.000 euros.

Los agentes han determinado que la mujer solía sustraer joyas a las víctimas que normalmente no usaban, como las del cónyuge fallecido y otras antiguas heredadas de antepasados. La investigación continúa abierta para determinar si la acusada pudiera estar implicada en algún hecho más aún por descubrir, según ha informado la Policía este viernes.

No es la primera vez que ocurre un caso de estas características porque la Guardia Civil arrestó en febrero de este año a otra mujer que habría robado 30.000 euros en joyas en la vivienda donde trabajaba.

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