R. González/EP
Villena
Martes, 7 de septiembre 2021
La subdirectora de Seguridad del centro penitenciario Alicante II, de Villena, fue agredida el lunes por un grupo de cinco o seis encapuchados en la puerta de su domicilio. La mujer fue interceptada en el momento en el que salía de la casa. Le amenazaron con que tuviera la «boca cerrada» en una investigación abierta sobre la actuación de tres funcionarios en la reducción de un recluso, enfermo mental, que tuvo lugar el pasado 16 de agosto y por la que la responsable de la prisión declaró ayer martes.
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La mujer se vio sorprendida. Los agresores rodearon, amedrentaron y golpearon a la funcionaria, según confirmó ayer en un comunicado la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias (IIPP), que condenó los hechos y mostró su «rechazo e indignación» por el «brutal ataque». Según relató, tres de los participantes en la agresión sujetaron por detrás a la responsable del centro Alicante II, mientras que otro le propinó dos fuertes golpes en la cara a la vez que la amenazaba con que mantuviera «la boca cerrada» en esa declaración.
La funcionaria denunció lo ocurrido ante las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
No era la primera vez que intentaban amedrentarla. La subdirectora ya había recibido amenazas «similares» por WhatsApp a través de un número oculto. Unos hechos que había puesto en conocimiento de los inspectores para que se añadieran al expediente de investigación abierto.
El sindicato Acaip-UGT, mayoritario en prisiones, trasladó ayer su apoyo a la subdirectora de la cárcel de Villena, que fue agredida cuando salía de su casa para ir a trabajar. En un comunicado expresaron su confianza en que pronto se esclarezca lo ocurrido y pidió que «se actúe con contundencia contra estos delincuentes responsables de esta acción.
Asimismo, el colectivo sindical puso de relieve la reivindicación histórica de que a los trabajadores de los centros penitenciarios se les catalogue como agentes de la autoridad. De esa manera, las agresiones que sufran en el ámbito de sus funciones «sean tratadas como atentado contra la autoridad con las consecuencias penales que pudieran tener». Además Acaip-UGT reclamó una modernización de los medios para desarrollar su trabajo, en el que deben intervenir en «situaciones violentas».
El máximo responsable de Instituciones Penitenciarias, Ángel Luis Ortiz, contactó con la afectada para interesarse por su estado y mostrarle su «apoyo incondicional». Le dijo que han puesto «todas las herramientas legales necesarias para esclarecer los hechos y detener a los agresores«.
Por su parte, el director de la prisión de Villena, Feliciano Crelgo, se sumó a las palabras de condena de lo que tildó de «agresión brutal». Según dijo, se trataba de algo «inaudito» y respaldó la postura hecha pública por Instituciones Penitenciarias.
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La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Gloria Calero, se mostró tajante ante lo sucedido a la subdirectora de la cárcel de Villena. Tras lo que considera una agresión «intolerable», aseguró que se está haciendo todo lo posible para «para que esto no quede impune«.
Calero insistió en que «no podemos tolerar» que una funcionaria de una institución penitenciaria sea objeto de una agresión. Hizo hincapié en que las personas que trabajan en las cárceles «tienen que sentirse seguras». «No puede pasar que salga de su casa y sea agredida», reiteró.
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