Restauran cinco refugios antiaéreos de la Guerra Civil para abrirlos al público

Los distintos refugios antiaéreos de la Guerra Civil repartidos por la capital alicantina han despertado en los últimos años cierto atractivo turístico y cultural y el Ayuntamiento anunció ayer la apertura de cinco nuevos emplazamientos que han sido localizados bajo tierra. El equipo de gobierno municipal aprobó ayer la convocatoria para poner en marcha las obras que permitirán la apertura al público de estos refugios ubicados entre los dos castillos de la ciudad. El Ayuntamiento destina unos 400.000 euros a estas obras que se prolongarán durante seis meses.

Estos baluartes se encuentran situados en General Marvá, Mercado Central, Padre Mariana, antigua Fábrica de Tabacos, Marqués de Molins y plaza Músico Óscar Tordera Iniesta -antigua plaza Hermanos Pascual-. Las obras, cuyo proyecto se aprobó en el mes de octubre, están impulsadas a través de las concejalías de Cultura y Coordinación de Proyectos con el objetivo de recuperar y conservar el patrimonio de la ciudad, así como potenciar el turismo cultural, poniendo en valor su memoria histórica, según esxplicó el concejal de Cultura, Antonio Manresa.

Por su parte, el edil de Coordinación de Proyectos, Antonio Peral, detalló que la zona donde se hallan esos refugios «contiene un patrimonio industrial, religioso y militar importante por su antigüedad, significación histórica y desarrollo urbano de la ciudad», unas «características arquitectónicas y potencialidad turística, social y cultural para el uso y disfrute de los ciudadanos y visitantes». Según el concejal es un buen momento para sacar a la luz estos espacios para que se conviertan en un «activo turístico que haga mas atractiva la zona».

Para ejecutar las labores de recuperación de estos refugios, los técnicos del Consistorio explicaron que se han de preservar los parámetros originales existentes y todo lo que ellos contengan, mediante los trabajos de saneado o consolidación que sean exclusivamente necesarios para mantener la infraestructura en óptimas condiciones de seguridad. También avanzaron que la ventilación será natural, pues estará habilitada en las puertas de acceso y, de manera complementaria, en algunos casos se acondicionarán los antiguos respiraderos de los que disponía el refugio.

Una vez finalicen las obras, la idea es acondicionarlos para que puedan estar abiertos al público como otros refugios de la Guerra Civil que se habilitado en los últimos años en la capital alicantina y que han recibido constantes de visitas de escolares, curiosos y turistas.