La Policía Local de Llíria detiene a cuatro personas por robar cableado eléctrico

La Policía Local de Llíria detuvo, en la tarde del pasado viernes 6 de mayo, a cuatro personas como presuntas autoras del robo de cable del alumbrado público en el polígono de Montecollado.

Al mediodía, se recibió un aviso de la presencia de un vehículo sospechoso en este sector industrial del municipio y que sus ocupantes podrían estar realizando un hecho delictivo. Hasta el lugar se desplazaron rápidamente varias patrullas policiales pero el coche ya había huido del polígono.

La acción policial buscaba determinar la relación con los hurtos que han tenido lugar recientemente en la ciudad.

Al revisar las cámaras de seguridad de la zona, se consiguió identificar la matrícula del vehículo y se montó un dispositivo especial, en colaboración con la Guardia Civil, para tratar de localizarlo. En uno de estos controles, agentes de la Policía Local dieron el alto al coche sospechoso y procedieron a detener a sus ocupantes, a los que se les incautó en el maletero varios metros de cableado eléctrico.

Los detenidos fueron puestos a disposición de la Guardia Civil. Ahora, la investigación policial tratará de esclarecer si estas personas también han sido partícipes de otros robos de cable de alumbrado público que se han producido en la localidad en los últimos meses y que han afectado a diversas zonas como las subidas a Santa Bárbara y San Miguel, viales del nuevo instituto, calle Censals, polígono de Carrasses o la entrada a Llíria desde Benissanó.

Se da la circunstancia de que otras poblaciones cercanas de la provincia de Valencia como Náquera también han sido víctimas de este tipo de acciones que causan un gran daño económico a los ayuntamientos. En este caso, el perjuicio económico fue de 14.000 euros en cobre más el gasto para devolver la zona a la normalidad. Éste es el balance del robo de cobre que dejó sin servicio de alumbrado a la zona conocida como de Consum, por estar ubicado un supermercado en las cercanías, durante unas dos semanas.

El modo de actuar de los ladrones en este caso se basó en aprovechar que no es una zona muy poblada. Abren las arquetas y conectan los cables subterráneos a un coche. A continuación, aceleran violentamente para extraer la máxima cantidad posible de cable y poder venderlo luego en el mercado negro.

Esta acción supuso graves daños en las infraestructuras eléctricas a los que deberá hacer frente el propio Ayuntamiento. El alcalde del municipio, Damián Ibáñez, lamentó lo ocurrido y explicó que el coste de la reparación por los daños en empalmes o crucetas puede rondar los 5.000 o 6.000 euros, por lo que el perjuicio para las arcas municipales será bastante considerable, rondando los 20.000 euros. Además, este gasto inesperado obligará a la creación de una partida para hacer frente al mismo.

• Temas
• Atracos
• Robos
• Guardia Civil
• Asociación Unificada de Guardias Civiles
• Llíria
• Náquera
• Robos en la Comunitat