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M. GARCÍA
BÉTERA
Jueves, 24 de febrero 2022, 11:18
Sale del centro con la cabeza alta para atender a los medios. No se esconde. Todo lo contrario. Desea que lo que le ha pasado ... sirva para algo. «No quiero nada punitivo para los alumnos. Quiero que aprendan», explica sin un ápice de rencor en sus palabras o su actitud.
Miquel Álvarez, el profesor de Física y Química que sufrió una agresión por motivos homófobos en el instituto de Bétera el pasado jueves, ha explicado a las puertas del centro lo ocurrido ese día. Según ha relatado, «me rodearon 150 personas, pero estoy con fuerzas para seguir». Junto a él, un miembro del equipo directivo aún lamenta lo ocurrido: «A ver si lo remontamos», piensa en voz alta.
Todo comenzó el pasado miércoles 16 cuando dos alumnas llevaron al centro unas banderas de defensa de los derechos LGTBI a raíz del caso de una reciente agresión ocurrida en Galicia. Desde el propio centro se les explicó que no se podían usar banderas de ningún tipo, ya que se podía interpretar como una provocación. Posteriormente, un día después, otros alumnos llevaron varias banderas de España, algunas de ellas preconstitucionales según ha podido saber LAS PROVINCIAS, y las exhibieron frente a sus compañeros.
Este profesor les conminó a retirarlas «pero no porque tenga nada en contra de la bandera de España, ni mucho menos, sino porque se estaba usando ese símbolo como un elemento de provocación».
En ese momento, Álvarez, quien se encontraba solo en esta zona del patio, fue rodeado por unas 150 personas, alumnos de segundo a cuarto de ESO. Algunas de ellas le tiraron del pelo, le empujaron e insultaron y le lanzaron trozos de bocadillo: «No lo había visto en mi vida, y menos en un centro educativo», explica.
Desde el propio centro e incluso desde el Ayuntamiento de Bétera se ha recordado que se trata de un instituto sobredimensionado, ya que tiene una capacidad para 500 alumnos y alberga a prácticamente el doble, lo cual hace más difícil mantener la convivencia en el mismo.
Pese a lo ocurrido, Álvarez ha continuado trabajando en el IES Les Alfàbegues como profesor sustituto de Física y Química, centro al que llegó hace sólo dos meses. Además ha recalcado que se siente arropado por sus alumnos y por sus compañeros de claustro desde el primer momento.
Los profesores acudieron al centro el pasado viernes vistiendo ropa negra en solidaridad con él: «Estoy superagradecido», afirma con un punto de emoción en su voz. Además, su teléfono móvil no para de recibir mensajes de apoyo desde diversos puntos de toda España.
Sus propios alumnos también han respondido apoyándole de una manera que le ha hecho emocionarse. Todos se han pintado las uñas, como las lleva Miquel, y le han dado un escrito en el que le manifiestan todo su respaldo y rechazan lo ocurrido.
La reflexión que Álvarez quiere que todos extraigan de este incidente atañe a todos: «Pido a las familias que los alumnos vengan al centro con los valores aprendidos. Porque aquí podemos hacer algo, pero lo más importante es lo que aprenden en casa». Insistió en la necesidad de seguir educándolos en valores de respeto y tolerancia.
A los muchos periodistas que se han concentrado en la puerta del centro les atiende con amabilidad pero les advierte: «Tengo 20 minutos. Luego tengo clase que los alumnos de segundo de Bachillerato tienen una PAU por delante». Pese a lo ocurrido, se siente «con fuerzas para seguir» y con la intención de que esas actitudes se vayan eliminando de la sociedad poco a poco. Pero reconoce que no es fácil «porque simplemente ha habido una chispa y ésta ha explotado».
A raíz de esa agresión, varios alumnos del centro han sido expulsados. Además, la Conselleria de Educación ha confirmado que se ha activado el Plan de Prevención de la Violencia y de Promoción de la Convivencia (Previ) por los incidentes «comunicados por un instituto del Camp de Túria».
De hecho, la investigación para determinar las posibles responsabilidades continúa y la cifra de alumnos expulsados podría superar la decena aunque las pesquisas prosiguen.
Los padres de alumnos del centro también han mostrado su apoyo al profesor y han rechazado lo ocurrido. En un comunicado han recordado que «la diversidad forma parte de nuestra sociedad y la hace más rica. Además, el respeto a las libertades individuales está recogido en la Constitución. Como padres y madres, estamos orgullosos de que nuestros hijos e hijas sean diversos y diferentes en gustos y aficiones, en el color de su piel, en la manera en como viven su sexualidad y en las creencias que cada uno de ellos tenga».
Afirman que, después de la familia y la escuela, «el instituto es el lugar donde nuestros hijos e hijas se forman y educan. Educar, etimológicamente, es 'criar, nutrir, alimentar', pero también 'extraer de' cada persona lo mejor que lleva dentro, toda su capacidad intelectual y emocional».
Recuerdan que la paz «no es sólo la ausencia de guerra. La paz es un estado de cosas en que una persona puede desarrollar el máximo de sus potencialidades: si hay agresiones, discriminación, acoso o rechazo, sea por la razón que sea, no hay paz. Queremos un instituto público y de calidad donde nuestros hijos e hijas se eduquen en una cultura de la paz y en el respeto a la diversidad, que es inherente a la convivencia en un estado democrático. Por esta razón, cualquier acto que atente contra la convivencia no tiene cabida en un centro educativo».
Insistieron en mostrar su apoyo «al profesor agredido y a todo el resto del claustro, así como al equipo directivo, que trabaja todos los días para contribuir a la formación de su alumnado. Asimismo, apoyamos las medidas educativas que el Centro ponga en marcha ante la gravedad de los hechos acontecidos».
En cuanto al alumnado que ha participado en la agresión, señalan que aún tienen «la esperanza de que continúen formándose y reflexionen sobre lo que han hecho. Al fin y al cabo, la educación es un proceso que dura toda la vida».
Lo ocurrido en el instituto de Bétera también ha tenido repercusión entre la clase política. La vicepresidenta y consellera de Igualdad, Mónica Oltra, ha advertido este jueves a Vox que la Generalitat continuará defendiendo la libertad y la diversidad.
«Lo primero que vamos a hacer es contrarrestar el odio que estáis sembrando», ha aseverado en el pleno de Les Corts en respuesta a una interpelación de este partido sobre qué piensa hacer la Generalitat para mejorar la vida de los valencianos
Oltra (Compromís) ha lamentado que en Bétera, «entre 150 y 200 adolescentes atacaron a un profesor por su orientación sexual, y lo hicieron como reacción a unas chicas que habían sacado la bandera arcoiris para defender la diversidad afectivo-sexual».
Esto demuestra, a su juicio, que los discursos de la extrema derecha están generando una confrontación en la sociedad «intolerable en términos democráticos».
Por tanto, ha recalcado que el gobierno valenciano defenderá tanto la libertad y la diversidad como el respeto y la dignidad humana «frente a discursos que generan odio, dividen y generan acciones crueles de nuestros adolescentes hacia personas que son diferentes».
La vicepresidenta ha advertido así a la diputada de Vox, Ángeles Criado, que en su partido «son gente peligrosa, antidemocrática y que siembra el odio, fragmenta la sociedad y deshumaniza a las personas que no piensan igual».
Por su parte, Compromís ha registrado una propuesta en Les Corts a raíz de esta agresión homófoba para instar al Gobierno a impulsar la ley nacional LBTBI ampliando la protección del colectivo en el ámbito educativo, al considerar que lo de Bétera «no es un hecho aislado».
«El Observatorio Valenciano contra la LGTBIfobia registró 140 agresiones en 2020, lo que supuso un aumento del 26% frente a las 111 que se produjeron en 2019, sin olvidar que también hay que tener en cuenta que no todas las agresiones se denuncian», apunta en un comunicado su portavoz adjunta Mònica Álvaro.
Por otra parte, la Plataforma en Defensa de l'Ensenyament Públic ha convocado una concentración en la Alameda de Bétera el próximo miércoles, 2 de marzo, a las 18.30 horas para mostrar el rechazo a esta agresión homófoba.
Esta plataforma la integran AMPA-València, STEPV, FE CCOO PV, FeSP UGT PV, Escola Valenciana, CAVECOVA, CGT, FAAVEM, FEPV, SEPC, BEA, Campus Jove, Sindicat d'Estudiants, Asociación de Directores de Primaria, Asociación de Directores de Secundaria, Movimientos de Renovación Pedagógica, ADIDE, FAMPA-Enric Valor, FAMPA-Penyagolosa y Valencia Laica, que se han reunido este jueves por la tarde para tratar los hechos ocurridos en el instituto.
En un comunicado, la plataforma han expresado su "rechazo contundente a la agresión sufrida por el docente" y han trasladado "su apoyo y solidaridad a la comunidad educativa del centro".
Además, los sindicatos y asociaciones han acordado emprender acciones como la elaboración de un manifiesto en "rechazo al discurso del odio y por la igualdad, las libertades y la diversidad" para que lo apoyen los claustros de todos los centros educativos de la Comunitat Valenciana.
La plataforma también ha pactado elaborar y facilitar en los ayuntamientos valencianos una moción en el mismo sentido que el manifiesto para que se apruebe de manera urgente.
Igualmente, anima a los centros a concentrarse a la hora del patio durante la semana que viene y llenar las redes sociales con fotos de las concentraciones.
Asimismo, insta a la Conselleria de Educación a que "dote del personal y profesorado necesario para atender en mejores condiciones el volumen de alumnado que duplica las posibilidades del centro (con mil alumnos cuando está pensado para 500)".
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