Cuando la Mare de Déu visitó Macosa en 1948

Los antecedentes de Construcciones Devís / MACOSA, el inicio del proyecto industrial decano de la metalurgia valenciana se inicia en 1897 con la constitución de los talleres Devís-Noguera que van evolucionando patrimonialmente de la mano de Miguel Devís Pérez y sus hijos, que transitan con un crecimiento exponencial en todos los sentidos, del taller de Marchalenes al emplazamiento histórico de Construcciones Devís/MACOSA en la actual calle de San Vicente Mártir.

Hay que reivindicar el nombre y rescatar del olvido el buen hacer de todos aquellos directivos y líderes empresariales valencianos que a lo largo toda una época entre los años 30 y 70 situaron a Valencia como referente del «saber hacer» empresarial y metalúrgico en España.

El 31 de diciembre de 1947, previo acuerdo de sus consejos de administración, presididos respectivamente por Joaquín Reig Rodríguez y Juan Villalonga Villalba se fusionan la valenciana Construcciones Devís, S.A., y la barcelonesa Material para Ferrocarriles y Construcciones S.A. (la antigua Can Girona), dando lugar a la empresa Material y Construcciones, SA (MACOSA). Los artífices de esta fusión, los hermanos Ignacio y Juan Villalonga, consiguen con esta operación fundar una nueva gran empresa metalúrgica, que formará parte de las empresas industriales controladas por su grupo bancario BANCOR, encabezado por el Banco Central.

El primer Consejo de Administración lo presidirá Juan Villalonga Villalba con Joaquín Reig Rodríguez de vicepresidente y entre sus consejeros se encuentran los hermanos Miquel y Daniel Devís, Antonio Noguera (presidente del Banco de Valencia), ejerciendo de consejero delegado Ramón Hernández Francés, director de Ferrocarriles de Cataluña.

A la nueva compañía, Construcciones Devís aporta el activo industrial de la factoría de Valencia, situada en la llamada en aquel tiempo Carretera Real de Madrid, hoy calle de San Vicente Mártir, con una extensión de 55.000 metros cuadrados y 1.657 trabajadores, talleres metalúrgicos referentes en España especializados en calderería pesada, construcción y reparación de locomotoras de vapor y eléctricas, coches de viajeros, vagones de todo tipo, tranvías y automotrices eléctricos. También aportó dos fundiciones: los Talleres Zaragoza situados en la avenida del Puerto nº 33, esquina la antigua avenida José María Orense, hoy Cardenal Benlloch y una pequeña fundición en Carcagente. Asimismo, aportó la fábrica de Alcázar de San Juan, creada por Construcciones Devís en 1941, con una extensión de 34.000 m2 y 406 trabajadores, especializada en la reparación y construcción de vagones y complementaria de la factoría de Valencia.

Como vemos, la tradición de las grandes empresa del metal valencianas viene de muy lejos y aunque casi todas lamentablemente han desaparecido como en el caso de UNL y también aunque de otro modo y causas la fábrica de Elcano de Manises, la historia metalúrgica que se inicia con los Devís se desarrolla a lo largo de más de 120 años y evoluciona de la vieja MACOSA de la calle de San Vicente a la modernísima factoría de Stadler Valencia en el Polígono del Mediterráneo en Albuixec, referente en España y Europa de I+D+i en la construcción ferroviaria, con el diseño y construcción de familias de locomotoras eléctricas y diésel eléctricas y no menos modernos sistemas de pasajeros en forma de tranvías y metro ligeros que son líderes en Europa, Asia Pacífico y Sudamérica.

Centenario de la Coronación En este año 2023 se cumplen el centenario de la coronación de la Virgen de los Desamparados y también el 75 aniversario de la visita de la imagen de la Virgen de los Desamparados a la fábrica de MACOSA el 7 de junio de 1948 dentro del programa de actos que se celebraron con motivo del XXV aniversario de dicha coronación en dicho añoLas imágenes se explican por sí mismas, los directivos, los trabajadores y trabajadoras de MACOSA y sus familias mostraron masivamente su fervor y devoción ante la patrona de todos los valencianos.

En una fábrica con tanta tradición industrial y social, sus trabajadores han guardado una memoria colectiva de su historia industrial y social que se ha transmitido oralmente de unas generaciones a otras, con el paso del tiempo ya no queda nadie de los que vivió ese día -quizás algún niño de entonces- pero los asistentes fueron capaces de relatarnos a los jóvenes obreros lo vivido ese día y somos pues, depositarios de estos recuerdos.

Una desinteresada donación de un compañero que guardaba fotos sobre el acto, me permitió incorporarlas a la Colección fotográfica de ferrocarriles e industria, y conservar la memoria gráfica del acto y hacer posible en este aniversario la publicación de una galería de fotos de tal acontecimiento.