Una deficiente cimentación en uno de los muros, posible causa del derrumbe de Peñíscola

Alberto Rubio, director general de Calidad y Rehabilitación de la Conselleria de Vivienda, y responsable del dispositivo desplazado hasta la localidad castellonense, explicó que, una vez que se ha dado por finalizado el rescate de víctimas y heridos, llega el momento de centrarse en las labores de desescombro. El primer objetivo es saber exactamente cuáles fueron las causas exactas del colapso.

Pero, además, se quiere determinar con exactitud en qué estado se encuentran las viviendas que quedaron en pie, si requerirán algún tipo de reforma integral y cuándo podrán volver los vecinos a ocuparlas. Por el momento no existe un plazo para saber este último extremo. Lo único que se les ha permitido durante esta mañana ha sido que vuelvan para recoger los enseres más imprescindibles para pasar las próximas jornadas.

Rubio no pudo fijar un plazo exacto para este análisis exhaustivo, que va a determinar el estado de las fincas que quedaron en pie, pero no descartó que se puedan tener que sustituir elementos comunes como escaleras o galerías.

El proceso que se va a seguir a partir de ahora incluirá la retirada de escombros por parte de especialistas en la materia y la toma de muestras de algunos de los materiales usados en la construcción de la finca. Rubio matizó que el hecho de que algunos de estos productos tengan que trasladarse a laboratorios puede retrasar algo el proceso, ya que estos laboratorios «no tienen una disponibilidad total».

Rubió también descartó que un movimiento sísmico haya tenido que ver con el derrumbe, ya que aunque la Comunitat es propensa a los mismos, es el sur el que más suele sufrir este tipo de episodios.

Por su parte, el arquitecto municipal de Peñíscola, Ramón Mallasén, asegura que el muro de carga pudo ceder por «humedades no detectadas durante años». El técnico ha explicado que aunque por el momento sólo es una teoría, otras posibilidades como la de un corrimiento de tierras parecen descartadas porque en la zona «no hay ninguna escorrentía«.

Mallasén ha indicado que aunque los materiales no son los mejores y hoy en día «no se usan mucho«, sí cumplen »los estándares de calidad« de hace treinta años. También ha indicado que la filtración ha podido pasar desapercibida durante mucho tiempo porque la cimentación «está compuesta por cámaras estancas donde no entra nadie».

El arquitecto municipal ha explicado, en este sentido, que se analizarán los bajos del resto de inmuebles de la zona, construidos de la misma manera, por lo que los vecinos no podrán acceder a sus domicilios, en su mayoría segundas residencias, hasta que no terminen las investigaciones. «Tenemos que hacer un análisis en profundidad y varios estudios, aunque no hay riesgo inminente de colapso«, ha dicho Mallasén.

Por otra parte, el único herido en el derrumbe, que se encuentra ingresado en el Hospital Comarcal de Vinaròs, ha abandonado la UCI y ya se encuentra en planta.

Además, al mediodía de este viernes ha tenido lugar un minuto de silencio tanto frente al ayuntamiento de Peñíscola como frente a algunos de los hoteles de la ciudad que han colaborado de manera altruista en acoger a los vecinos que no pueden regresar a sus casas. Anoche había 36 familias en varios hoteles pero se prevé que esta cifra se reduzca de manera paulatina.