

Secciones
Servicios
Destacamos
M. J. CARCHANO
Sábado, 28 de marzo 2015, 00:18
La plaza de la Constitució de Aldaia retrocedía el pasado 4 de agosto 300 años para recuperar el Tribunal del Comuner, una institución con un reglamento muy similar al de las Aguas de Valencia, y que a partir de ahora volverá a regir los conflictos que se produzcan entre los regantes de la comunidad del Rollet, que ocupa la extensión más importante de la huerta de Aldaia y está documentada en un privilegio otorgado el 10 de abril de 1268 por el Rey Don Jaime I.
Sin embargo, sus orígenes se pierden en las brumas anteriores a la Edad Media y es difícil datar con exactitud este tribunal, según explica José Bonet, presidente de la institución y catedrático de Derecho Procesal en la Universitat de València. Durante la época musulmana parecía ya existir, ya que en el privilegio de Jaime I se hablaba de «que tenéis tal y como era costumbre hacer desde los antiguos tiempos de los sarracenos». Bonet añade que aunque «por el momento no se dispone de dato ni constatación documental que lo atestigüe, al existir normas que regulaban la distribución equitativa del agua es más que probable que ya entonces se plantearan conflictos y, por tanto, que se hubiera establecido un sistema para su solución en aquellos tiempos».
Las pocas referencias que existen están, por ejemplo, en unas ordenanzas de 1589, donde se exigía al 'sequier' que sea hombre bueno, que tuviera su casa en Aldaia -por tanto, que fuera accesible-, y que celebrase sus juicios en la plaza, «lo que presuponía que fuera con oralidad y publicidad. Esta escasa regulación en realidad es coherente con el carácter consuetudinario del tribunal, y no podía ser de otro modo», explica el presidente de la institución. De hecho, «si repasamos las ordenanzas de las acequias sometidas al Tribunal de las Aguas de Valencia apenas había referencias escritas, ya que el procedimiento de estas instituciones se establece por tradición o repetición a lo largo de las generaciones».
A pesar de la falta de referencias en las ordenanzas de 1747, Bonet cree que hay documentación que constata que el Tribunal del Comuner siguió reuniéndose en la plaza de Aldaia para resolver controversias entre los regantes del Rollet, o acequia del Comuner, durante los siglos XVIII y XIX.
Al igual que el Tribunal de las Aguas de Valencia, el tradicional Tribunal del Comuner se constituía los jueves en la plaza del municipio. A pesar de que la periodicidad se ha mantenido en Valencia, no prevé Bonet que haya una reunión semanal a una hora determinada, sino que se convocará cuando haya algún conflicto que resolver. De hecho, por razones de diversa índole, desde hace bastante tiempo no se ha considerado necesaria su constitución, tanto que a pesar de que en 1960 se aprobó un reglamento que regulaba el tribunal, no consta que se haya constituido desde entonces.
Fue el 30 de marzo del pasado año cuando se aprobó en una junta general extraordinaria que sirvió para nombrar los miembros del tribunal y para actualizar las ordenanzas que regirán la institución los próximos años. Los conflictos se resolverán mediante mediación y sus decisiones son tan válidas como lo son las sentencias de un juzgado ordinario.
En concreto, el tribunal tiene como objetivo garantizar los derechos y obligaciones de los regantes, máxime en una época de sequía, para garantizar una distribución del agua justa y pacífica. A pesar de que había desaparecido, su recuperación es importante porque forma parte de la cultura y tradición valencianas como lo es el Tribunal de las Aguas de Valencia, que fue designado como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.