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Savia renovada  para el campo

Savia renovada para el campo

Castellón cuenta hoy con varios polígonos industriales y apuesta por el turismo gastronómico y cultural impulsados por la llegada del AVE

B. LLEDÓ

Sábado, 28 de marzo 2015, 00:17

La actividad industrial, administrativa y logística bulle en Castellón, una ciudad que, además, es un gran foco universitario, cultural y comercial. Con más de 172.000 habitantes, es el principal centro de negocios y servicios del área metropolitana de la Plana.

El cultivo de los cítricos ha sido aquí, como en muchas otras zonas de la Comunitat, clave para el crecimiento y desarrollo de la economía local. Pero en los últimos años muchas explotaciones agrícolas se han abandonado. Sin embargo, ahora muchos jóvenes emprendedores se han lanzado al campo y la ganadería con nuevas propuestas, diversificando las explotaciones y potenciando la industria agroalimentaria de la zona. Savia renovada.

En el sector industrial, «Castellón cuenta con el primer y único polígono de industria pesada en la Comunitat», tal y como explican desde la Confederación de Empresarios de la ciudad (CEC). Creado en 1967, en los alrededores del núcleo urbano del Grao de Castelló, junto al puerto, el polígono alberga emblemáticas empresas del sector energético y de refinación de petróleo así como otras firmas dedicadas a la fabricación y suministro para los subsectores industriales.

El sector cerámico se ha ido desplazando con los años a otras localidades limítrofes y se ha alejado del crecimiento poblacional y de los numerosos núcleos habitados diseminados por el término municipal de Castellón. Los nuevos asentamientos industriales elegidos por la potente industria cerámica se extienden desde Castellón hasta el municipio de l'Alcora y Vila-real, formando el denominado Triángulo de la Cerámica.

La creación de polígonos en el extrarradio de la ciudad, como la Ciudad del Transporte, ha permitido el establecimiento de muchas empresas de actividades heterogéneas y otras auxiliares relacionadas con los distintos sectores económicos.

«Para atender a los intereses de la exportación, se ha desarrollado un subsector de transportes y logística de gran peso en su término municipal que se ha consolidado en el marco de la estrategia local y provincial en donde se concentran un buen número de empresas de transporte nacional e internacional», valoran desde CEC.

La crisis financiera ha comprometido la continuidad de muchas empresas. La coyuntura económica también ha hecho mella en el sector de la construcción y otros muchos vinculados. En la actualidad, desde los sectores profesionales y empresariales de esta área se trabaja en busca de un nuevo modelo que conjugue el acceso a la vivienda, el impulso a la rehabilitación estructural y de accesibilidad de edificaciones y la regeneración y renovación urbana.

Otra especialización tradicional de la industria castellonense es la del sector textil, y más concretamente el subsector de la confección de prendas para vestir, vestuario laboral y otras piezas de ropa.

Uno de los puntos fuertes es el sector turístico en la ciudad y más concretamente del Grao, con su rica y variada gastronomía y zona de ocio y de servicios. Los alimentos del mar han permitido el desarrollo de una marca de calidad en el turismo gastronómico y su promoción en el ámbito nacional e internacional.

El gran revulsivo turístico-deportivo de los últimos años lo constituyen el Maratón Internacional Ciudad de Castellón y su 10K. También la Marató i Mitja, de 63 kilómetros que trascurren desde Castellón hasta el macizo del Penyagolosa, en Vistabella del Maestrat, con una subida acumulada de 3.045 metros, y una de las pruebas de resistencia más relevantes del panorama nacional. Sólo en el pasado año se celebraron unas 200 citas deportivas que dejaron en la ciudad más de 6,5 millones de euros, gracias a las más de 65.000 pernoctaciones que generaron. Además, se han creado diversos escenarios urbanos como el Museo de Bellas Artes, el Espai d'Art Contemporani o el Palau de Congressos i Auditori de Castelló, para atraer el turismo cultural.

Según la organización empresarial, otros elementos favorables para hacer de Castellón una ciudad más pujante y competitiva son, por una parte, la apertura del aeropuerto y la llegada del AVE.

El comercio

El sector comercial ha sufrido una auténtica transformación en los últimos años con la incorporación de grandes centros comerciales e instalaciones 'low cost' en los barrios periféricos y ejes comerciales de la ciudad. «Se ha completado así una oferta consolidada desde hace muchos años por parte del comercio urbano. Son hoy uno de nuestros principales pilares económicos», aseguran desde la Confederación de Empresarios de Castellón (CEC).

La creación de la Universitat Jaume I ha supuesto un hito importante en la historia de Castellón, ya que constituye una oportunidad para los jóvenes de la provincia y de otros lugares que quieran cursar estudios superiores.

En los últimos años, una media de 14.000 estudiantes estudian alguna de las titulaciones. Varias de esas carreras están relacionadas con el desarrollo de las nuevas tecnologías.

La Confederación de Empresarios de Castellón, consciente de la importancia que estas tienen hoy, colabora en la transformación de ese conocimiento adquirido por sus estudiantes en activos estratégicos al servicio de la competitividad de la provincia y de la Comunitat, como lo demuestra su presencia en el Parque Tecnológico, Científico y Empresarial ESPAITEC.

«Afortunadamente, los indicadores de la economía provincial conocidos en el segundo semestre de 2014 muestran en general que la tendencia económica de esta ciudad y su provincia ha cambiado y que se mantiene el ritmo de creación de empresas y crecimiento del empleo», apuntan desde CEC. Castellón y su provincia cuentan con enormes fortalezas para superar los momentos adversos, y que pasan por una industria «fuerte y altamente competitiva» como lo vienen demostrando las buenas cifras de exportación relacionadas con los productos cerámicos y citrícola. «También una riqueza natural que nos ha proporcionado nuestro territorio, y que, junto a la capacidad creativa y emprendedora de nuestras gentes, constituye el principal activo económico, cultural y ambiental que tenemos los castellonenses», defienden.

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