Vecinos de la urbanización Llobatera de Riba-roja reclaman más seguridad por los okupas

Vecinos de la Llobatera de Riba-roja se concentraron, por segunda vez, ante las puertas del ayuntamiento para reclamar más seguridad por los okupas que existen en la urbanización desde hace aproximadamente dos años y que han enturbiado la tranquilidad que se vivía en sus calles.

Después de la primera manifestación que se organizó en febrero para denunciar la situación, los residentes apuntan que "hubo un aumento de la vigilancia y los controles policiales pero duró solo un par de semanas" y advierten de que durante el mes de marzo "entraron a robar en más de una decena de casas, en algunas en varias ocasiones, e incluso con los dueños dentro".

La situación respecto a los dos chalés ocupados ilegalmente no ha mejorado. "Siguen en sus casas, enganchados a la luz y al agua", explican y mientras desde el Ayuntamiento "dicen que no pueden hacer nada, nosotros nos sentimos desprotegidos y abandonados".

Este grupo de vecinos de Llobatera ya denunció en el mes de febrero la posible presencia en una de las dos viviendas de un preso fugado de la cárcel de Picassent, para a alertar de la situación que se ha ido agravando en estos últimos meses y que ha hecho que muchas propiedades hayan instalado cámaras de vigilancia. Además, los residentes temen que se extienda el "efecto llamada".