Jose Forés Romero
Lunes, 19 de mayo 2014, 19:43
La historia se repite. Demasiadas veces. Vecinos de diferentes localidades haciendo balance del daño que los incendios que han azotado a la Comunitat durante el último mes han provocado en sus domicilios. El último en Manises. Un fuego que se inició el pasado viernes y que obligó a desalojar 50 chalets de la zona del Barranc Fondo y otros 170 de la zona de La Presa. Toni es uno de los residentes que ha sufrido los daños del incendio. No se encontraba en la casa en el momento del desalojo y da gracias por ello y porque, a pesar de que las llamas entraron en su parcela, la fortuna quiso que el mal no fuera mayor. «Solo los setos y la valla, poco más, por poco, las ventanas sí que han reventado y las chispas llegaron al mobiliario. El problema es que esta zona está muy seca, no se limpia y cualquier cosa, puede provocar una desgracia. Era normal que hubiera un incendio», afirma este vecino de La Presa.
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En estos momentos se investiga si el fuego arrancó dentro del parque natural.
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