El estado de salud del Papa Francisco empeora tras sufrir una crisis respiratoria
Un agricultor aparta árboles secos por la falta de lluvia en un costado de su campo en Godelleta. :: txema rodríguez

La intensa sequía deja cerca de 500 millones de pérdidas en el campo

La Unió de Llauradors denuncia que la conselleria adeuda más de un año y medio de ayudas a agricultores y ganaderos

JOSÉ M. ORTUÑO

Martes, 30 de diciembre 2014, 00:26

«El año ha sido fatídico para el campo». Así de contundente se mostró ayer el secretario general de la Unió de Llauradors i Ramaders, Ramón Mampel. La sequía ha hecho mucho daño en toda la Comunitat, dejando pérdidas cercanas a los 500 millones de euros. A ello hay que añadir las granizadas de principios de otoño, que también supusieron un grave perjuicio económico para el sector.

Publicidad

Hacía años que la climatología no se comportaba de un modo tan adverso como en el presente 2014 con de los agricultores, aunque la situación negativa llegó todavía antes. Durante los últimos seis meses de 2013 la lluvia se esfumó casi por completo del territorio valenciano. El campo, por su parte, se encontraba cada vez más seco y necesitado del líquido elemento, puesto que este año ha llovido prácticamente la mitad de lo que suele ser habitual.

«El año ha sido negativo sobre todo en dos aspectos», reconoció Mampel. «Por una parte, nos encontramos con la sequía. En un primer balance ya nos dimos cuenta de que las pérdidas podían superar bastante los 400 millones de euros. A ello hay que sumar el pedrisco, que afectó especialmente a la zona de la Ribera, en algunos municipios incluso hasta en cuatro ocasiones y que han supuesto otros 100 millones», continuó.

La falta de agua ha afectado a los cultivos de secano. «Prácticamente se ha perdido toda la cosecha de cereales. Los almendros tampoco han dado mucho fruto. Si nos paramos a revisar los olivos, normalmente salen de media 22.000 toneladas de aceite. El mejor año, llegamos a las 32.000, mientras que este apenas ha habido 10.000. Es decir que no llegamos al 40 por ciento de la producción. Y con la vid sucede lo mismo», lamentó.

Aumento del gasto

La situación en las cosechas de regadío no ha sido muy diferente. El fruto no ha crecido lo que suele ser habitual en muchos puntos de la Comunitat. Además, la escasez de agua provoca «que sea necesaria más energía porque hay que sacarla de más abajo, lo que supone un coste adicional». Asimismo, ante la falta de lluvia, los campos se riegan mucho menos de un modo natural, por lo que se hace imprescindible pagar más por el riego. «Han aumentado mucho los costes de producción», advirtió Mampel.

Publicidad

No se trata de los únicos problemas de dinero que sufren los agricultores valencianos. En los últimos años, la situación de impagos ha ido mejorando, pero muy poco a poco. En su día, incluso, se vieron obligados a manifestarse frente a la puerta de conselleria.

«Es cierto que ahora mismo se ha avanzado mucho y que con esfuerzo este nuevo equipo ha ido pagando las ayudas agrícolas conforme ha ido teniendo dinero», puesto que llegaron a adeudar hasta tres años. Algo peligroso porque a «los cuatro caduca el expediente y tendrían que haberse abierto otros nuevos». Sin embargo, la situación sigue sin ser la mejor. En estos momentos, «a muchos agricultores y ganaderos les deben aún el último año y medio. En otras comunidades autónomas también tardan en pagar, pero sólo unos meses. Aquí hemos mejorado mucho, pero no sabemos la cifra exacta que adeudan porque no nos dan datos».

Publicidad

Menor presupuesto

Desde la Unió de Llauradors i Ramaders también lamentan que se hayan ido reduciendo los presupuestos desde el Consell, lo que para Ramón Mampel demuestra «la poca atención que prestan a un sector que lidera las exportaciones y que está creando empleo. Muchos jóvenes se encuentran sin trabajo y deciden empezar en la agricultura. Si quieren llevar a cabo políticas agrarias es necesario que no se reduzca tanto la partida que se destina».

En 2013 descendió por primera vez en la última década «de la barrera psicológica de los 300 millones de euros y ya no hay manera de que se acerque». De cara a 2015 se han presupuestado 255 millones de euros, lo que significa que desde 2002 se ha reducido un 34 por ciento. Además, desde la Unió destacan que los gastos de personal y funcionamiento de la Conselleria de Agricultura siguen siendo muy relevantes respecto al resto de capítulos al suponer un 36 por ciento.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete a Las Provincias al mejor precio: 3 meses por 1€

Publicidad