«Los días mejores de la Comunitat están por venir»

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha afirmado que, "honestamente", cree que "los días mejores de la Comunitat Valenciana están por venir", ya que dispone de una red empresarial "muy dinámica, muy abierta, muy flexible y muy capaz de adaptarse a los cambios".

El ministro, que ha pronunciado en la Cámara de Comercio de Valencia una conferencia sobre "Marca España. Internacionalización de la empresa española", ha explicado que lo que le corresponde al Gobierno español es que la Comunitat sea "de las adelantadas, de las pioneras en aprovecharse" del cambio de circunstancias mundial.

La Comunitat Valenciana tiene "una enorme oportunidad" en este cambio de modelo, ya que se ha caracterizado en el tiempo por ser una región "muy abierta, muy volcada hacia el exterior", ha afirmado el ministro, quien ha considerado que el Corredor Mediterráneo es "una obra clave" en ese proceso de apertura.

A su juicio, en este cambio de modelo lo que debe hacer el Gobierno es favorecer esa tendencia y a las comunidades más dinámicas y más exportadoras, como la valenciana.

"Vivimos en un mundo en cambio, y el cambio en este momento probablemente es mucho más acelerado de lo que hemos vivido anteriormente", ha manifestado el titular de Asuntos Exteriores.

En España, ha explicado ante un centenar de empresarios, se está en un cambio de modelo "radical", pues hay que pasar de un modelo económico "antiguo, basado en el endeudamiento y en el ladrillo", a uno "basado en la neurona, en la tecnología, en la innovación, y liderado por el sector exterior".

En ese contexto, ha indicado, la Marca España busca mejorar la percepción que "los otros tienen de nosotros", que favorezca la llegada del ahorro para financiar la economía, inversiones extranjeras para crear empleo, fomente las exportaciones y beneficie a las empresas españolas en el exterior.

"El cambio favorece a los que saben aprovechar sus oportunidades", ha insistido el ministro, para quien al Gobierno le corresponde establecer el marco de referencia para las empresas y desarrollar las infraestructuras.

En el ámbito de la Unión Europea, ha indicado que la unión bancaria y la creación de un mercado energético único resuelven dos "cuellos de botella" para las empresas españolas, que pagaban un interés superior por el crédito y unos costes energéticos mayores que sus competidoras.

"Si además favorecemos la conexión con la Europea continental, con el resto de la Unión Europea, donde todavía seguimos exportando el 60 %, estamos en la buena dirección", ha defendido.

El ministro ha explicado que se está ante una nueva gobernanza mundial, en vísperas de un orden monetario nuevo, y ante un cambio en el orden comercial, donde hay que terminar el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, que dará la llave para abrir las negociaciones con Mercosur.

También ha alertado de que el desarrollo económico mundial no puede ser solamente economicista, sino que debe incluir la inclusión social y el respeto al medio ambiente.

"Europa está también en un cambio muy acelerado, para adaptarse a este cambio. Estoy convencido de que estamos en vísperas de una unión federal al menos de los diecinueve países que compartimos moneda", ha señalado García-Margallo, para quien lo que ocurre en Grecia evidencia que las instituciones son "muy provisionales, muy frágiles".