La primera línea de defensa contra el fuego

En esta época del año en la que, por desgracia, los incendios forman parte de la agenda informativa habitual, las brigadas de bomberos y los servicios de emergencia suelen acaparar todos los focos a tenor de la gran labor que realizan.

Sin embargo, existen otros actores en la guerra contra el fuego que, quizás, son menos conocidos. Son los vigilantes forestales y los agentes medioambientales, los colectivos que trabajan en la prevención de incendios. Son la primera línea de defensa contra el fuego.

Lo más importante es que haya una conciencia social; sin el apoyo de la sociedad, podemos ser miles de trabajadores, que no conseguiremos nada, señaló Toni Bernat, vigilante forestal de Vaersa. Los trabajadores podemos dejarnos la piel, pero ha de ser la ciudadanía la que colabore, añadió.

En total, más de 700 hombres y mujeres vigilan los montes de la Comunitat Valenciana. 449 corresponden a la empresa pública Vaersa, y 264 son Agentes Medioambientales.

La mayoría de los incendios son provocados por negligencias. Es gente que no llega a tener la intención de hacer dañar pero que, por su negligencia o su imprudencia la lía muy gorda, explicó Ángel Lizama, agente medioambiental.

Representantes de estos dos colectivos se reunieron en la mañana del lunes con la nueva consellera de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural. Lo hicieron en el mirador del Garbí, y aprovecharon la oportunidad para trasladarle sus inquietudes y necesidades para cumplir con su fundamental trabajo.

Lo principal es que la gente respete las prohibiciones de hacer fuego o tirar basura; seguir las recomendaciones del personal que estamos vigilando y, sobre todo, tener sentido común y dos dedos de frente, recalcó Toni Bernat.

El mayor peligro que tiene el bosque mediterráneo es el fuego; cuando algo se quema, no se pierde sólo la vegetación que arde; lo más importante, y lo que menos se ve, es el suelo que se pierde, destacó Ángel Lizama.

Una emergencia como es un incendio debe ser atajado en ese momento, pero apagarlo es una labor a largo plazo, y lo que hay que hacer es gestionar bien los montes, declaró la consellera de Medio Ambiente.

Tenemos un gran equipo de técnicos en la Conselleria que, en colaboración con las brigadas y vigilantes forestales, que conocen muy bien el terreno, deben ir creando esas actividades de prevención, destacó Elena Cebrián.

La respuesta inmediata es la extinción, pero el trabajo de fondo es la prevención, y es algo que se debe llevar a cabo durante el invierno, la primavera, el otoño y el verano también, concluyó la consellera de Medio Ambiente.