Marines ya alberga los equipos de misiles Patriot del Ejército español

La nueva batería de misiles Patriot adquirida por el Ejército Español ya ha llegado a la base militar de Marines. Como avanzó LAS PROVINCIAS a principios de año, el cuartel valenciano está destinado a convertirse en sede, a nivel nacional, de esta importante tecnología antiáerea. Las otras dos baterías similares que actualmente se encuentran desplegadas en Turquía ante la amenaza del Estado Islámico también se trasladarán a Marines cuando concluya la misión española en esta zona.

De esta manera, España refuerza y renueva su potencial armamentístico ante cazas o misiles, una necesidad para la que el Ministerio de Defensa ha destinado 41 millones de euros. El material ha sido comprado a Alemania y la pretensión del Gobierno es que los tres equipos Patriot permanezcan en Valencia.

Hasta ahora, la única batería que poseía España descansaba en Sevilla, bajo competencia del Regimiento de Artillería Antiaérea 74. Cuando regrese la maquinaria militar desplazada a la frontera turca con Siria y se complete todo el equipo Patriot español, serán los militares valencianos del Regimiento de Artillería Antiaérea (RAAA) 81 los encargados de su mantenimiento y manejo en Marines. Y, por supuesto, también se activarán en caso de misión internacional o eventos nacionales que requieran una fuerte protección del espacio aéreo.

El primer conjunto de lanzaderas llegó a principios de julio a través del Puerto de Sagunto. Desde allí equipos de transporte especial, tanto civiles como militares, trasladaron por carretera las baterías hasta la base valenciana. Su recepción ha supuesto reformas en las instalaciones donde van a permanecer y una adaptación de los soldados y oficiales que a partir de ahora deben manejar los equipos Patriot. Han ampliado su formación con cursos en Estados Unidos y Alemania.

Pieza a pieza

Decenas de miembros del regimiento de Marines han partido ya a Turquía para familiarizarse con los Patriot enviados por España. Allí trabajaran mano a mano con los militares sevillanos que hasta ahora han sido los guardianes de este poderoso armamento. En el siguiente relevo, serán ya los valencianos los encargados de su control en la misión para frenar al Estado Islámico.

La elección de Valencia como sede definitiva y única de los Patriot se debe a la experiencia en artillería antiaérea de los militares destinados en Marines, más que a razones geográficas ante los países en conflicto en África u Oriente Próximo. Cada una de las tres baterías posee ocho lanzadores con capacidad para activar cuatro misiles. Están compuestas por remolque, vehículo tractor, radar y otros dispositivos técnicos que requieren entre 60 y 80 artilleros para su manejo. Pueden derribar tanto aviones como otros misiles tácticos.