Dos mil jóvenes valencianos junto a Francisco

No lo van a olvidar. El viaje a Cracovia para participar en la Jornada Mundial de la Juventud convocada por el papa Francisco ya está impreso en su memoria para siempre. Los dos mil jóvenes valencianos que partieron de la Comunitat acompañados por el cardenal arzobispo, Antonio Cañizares, para participar en el encuentro mundial regresarán con un mochila repleta de buenos momentos, amigos de todo el mundo y de los mensajes que el papa Francisco les ha trasladado en los últimos días.

Han participado en todas las celebraciones portando señeras que les identificaban como valencianos y vistiendo la camiseta que correspondía a los que formaban parte de la peregrinación diocesana. La representación de la Comunitat no faltó a la misa conclusiva que ayer presidió el Papa en el Campus Misericordiae en la ciudad de Brzergi. El cardenal Cañizares concelebró la eucaristía junto al pontífice. Los jóvenes de la Comunitat acudieron a la misa de despedida tras la vigilia de oración en la que participaron el sábado por la tarde. Y días antes recibieron las catequesis del cardenal Cañizares.

Oración y formación han ocupado buena parte de su tiempo. Pero no han sido las únicas compañeras de viaje de los dos millares de valencianos que hoy inician su regreso a casa. También han disfrutado de la convivencia con amigos y con jóvenes de todos los lugares del mundo, compartido cantos y visitas a lugares de gran interés. La peregrinación valenciana se acercó hasta Wadowice, la ciudad natal de San Juan Pablo II.

El grupo de peregrinos organizado desde el arzobispado tiene previsto iniciar hoy el viaje de regreso. Pero antes de llegar a Valencia se detendrán en Francia, concretamente en Taizé, para pasar varios días junto a los miembros de la comunidad ecuménica que la pasada Navidad protagonizó un encuentro internacional en Valencia.

A la expedición diocesana, unos 300 jóvenes, se sumaron los grupos movilizados por parroquias, colegios, asociaciones y movimientos religiosos. La suma de todos ellos dio el resultado de esos dos millares de cristianos valencianos que en muchos casos ya contaban con la experiencia de anteriores JMJ y que probablemente repitan en Panamá.