Veterinaria y Arquitectura, las carreras con más licenciados en el extranjero

El primer estudio del Instituto Nacional de Estadística sobre la situación laboral de los universitarios españoles incluye cifras valencianas de la famosa «movilidad exterior» que acuñó la ministra Fátima Báñez, refiriéndose al éxodo de universitarios hacia el extranjero en busca de trabajo.

A finales de julio se completó el avance conocido en diciembre que situaba a la Comunitat entre las regiones con más titulados en otros países, pero ahora se pueden conocer las áreas de conocimiento donde el fenómeno es más claro: la comunicación audiovisual, la veterinaria, la arquitectura y la construcción y las humanidades. A nivel nacional el panorama no es muy distinto, si bien ganan peso la enfermería o las filologías.

El informe se realizó en base a entrevistas cruzadas con datos oficiales del sistema universitario. Consistió en tomar como referencia a los estudiantes que se titularon en el 2009-2010, por lo que se corresponden con las antiguas licenciaturas y diplomaturas, a los que se les preguntaba por su situación laboral cuatro años después de acabar (2014).

De los formados en las universidades valencianas con un trabajo, el 90,8% lo tenía en España y el 9,2% restante en el extranjero. Por ámbitos de estudios, el 22,5% de los licenciados en audiovisuales empleados estaban fuera. Les seguían los arquitectos (21%), los titulados en humanidades (19,4%), los veterinarios (19,3%) y los que cursaron ingenierías o estudios afines (18,8%).

En el otro extremo de la clasificación se situaron los estudios relacionados con el magisterio y los de Medicina. El INE establece que todos trabajaban en España, con la única excepción de los docentes de Educación Infantil, con un 2% de presencia en otros países.

También resulta llamativo que la movilidad internacional sea más acusada que la nacional. De la cohorte analizada, el extranjero fue el principal destino de los universitarios valencianos empleados, por delante de cualquier comunidad autónoma: el 9,2% estaba en otro país, el 4,5% tenía trabajo en Cataluña y el 3,9% en Madrid, por citar los valores más altos. En el resto de regiones la presencia 'valenciana' era más bien residual (menos del 1,5%).

El INE también evalúa parámetros como la calidad del trabajo o las áreas de conocimiento con mayor o menor empleabilidad. En cuanto al primero, pese a que la tasa de empleo es mayor entre el colectivo universitario que entre los jóvenes con estudios inferiores, los datos deslizan cierto nivel de precariedad.

Calidad del empleo

Por ejemplo, el 12,6% de los que trabajaban lo hacían, cuatro año después de licenciarse, con contratos de prácticas, becas o de formación, y un 36% eran asalariados con vinculación temporal. El 10,7% declaró ser empresario o autónomo mientras que los trabajadores por cuenta ajena con contrato fijo alcanzaron un discreto 39,3%. Salvo en los emprendedores, en el resto de categorías las cifras nacionales fueron mejores que las valencianas. En cuanto a la jornada, en el 24,9% de los casos era a tiempo parcial.

Respecto a las disciplinas universitarias donde más incidencia tuvo el paro, destacan las de Humanidades, con una tasa del 40,3%, Artes (45,3%) o Psicología (34,9%). En cambio, las mayores tasas de empleo correspondieron a Medicina (98,5) y Veterinaria (94,4%).

Por último, a nivel global los estudiantes de los centros valencianos presentaron una tasa de paro del 21,6% -recuérdese, cuatro años después de terminar-, cifra que aunque parecida a la media nacional (19,2%) queda lejos de las comunidades mejor situadas, como Cataluña (11,8%), Aragón (13,6%) o Islas Baleares (13,4%).