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efe
Lunes, 28 de noviembre 2016, 12:18
El actual noviembre está resultando más lluvioso de lo que vaticinaban los modelos de predicción a comienzos del otoño, pese a lo cual no palía la situación de intensa sequía que se acumula a lo largo de 2016 al sur de la Comunitat Valenciana.
Según los datos del Laboratorio de Climatología de la Universidad de Alicante, durante la tarde de ayer se registraron lluvias moderadas y "buenas para el campo y el monte" aunque también se generaron tormentas "que en algunos casos dejaron algo de granizo".
Han destacado los más de 21 litros por metro cuadrado de Busot, asociados a una pequeña tormenta local que entró desde el mar mientras que en Alicante capital la tormenta afectó de manera "muy irregular" a los barrios y pedanías.
Esto es así porque se observaron 4,8 litros en el barrio de Rabasa por 20 en la partida del Rebolledo y en el barrio de La Florida), algo similar a lo que sucedió en Elche.
En El Realengo, en Crevillent, una tormenta dejó algo más de 20 litros y en Villajoyosa la cifra rozó los 15 (14,8), al tiempo que en algunas zonas del Alto Vinalopó (Beneixama 20,4 y Villena 16,8) y del Comtat (Agres 17) se superaron estos 15 litros con lluvia moderada.
"Noviembre se está comportando mejor de lo que señalaban los modelos de predicción a comienzos del otoño, que hablaban de un mes seco en el litoral mediterráneo", ha señalado a Efe el responsable del Laboratorio, el catedrático Jorge Olcina.
En todo caso, el experto ha advertido de que las cuantías acumuladas son escasas ya que, por ejemplo, en la ciudad de Alicante se llevan 127 litros desde el 1 de enero cuando la media normal es de 325: "Tendría que habernos caído aquí, lo que ha llovido en Valencia ciudad para mejorar un poco las cosas".
Olcina ha indicado que a lo largo de la tarde volverá a llover aunque se espera que "poca cosa" dentro de una jornada en la que la inestabilidad "va a menos" al sur de la Comunitat Valenciana.
Este episodio de lluvias es consecuencia del avance de un embolsamiento de aire frío en altura hacia el Estrecho junto con la entrada de vientos de origen marítimo, lo que ha originado chubascos de sur a norte.
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