Prueba de Sistemas Robóticos, durante el campeonato autonómico de FP de 2023. Jesús Signes

Todos los alumnos de FP se formarán en empresas desde primer curso

La oferta de plazas en la Comunitat Valenciana crecerá un 16% a partir de septiembre y se añade un título nuevo: Seguridad privada

Joaquín Batista

Valencia

Miércoles, 29 de mayo 2024, 12:05

Los estudios de Formación Profesional incluirán, a partir de septiembre, prácticas en empresas para todos los alumnos, que a diferencia del modelo actual se realizarán desde el primer curso. Aunque cada instituto o centro integrado fijará la duración concreta y determinará qué tipo de contenidos ... y destrezas se abordan en el entorno de trabajo, al menos serán ochenta horas para los grados básicos y cien para los medios y superiores.

Publicidad

Se trata de una de las principales novedades que trae el próximo curso para la FP, que crece en el número de plazas, sobre todo en ciclos de la familia de Informática y Comunicaciones, y que sumará un grado de nueva implantación en la Comunitat, el de Técnico en Seguridad, que se podrá cursar a partir de septiembre en Alicante y Elda. Su creación se justifica en la creciente demanda de vigilantes privados.

La Ley de Ordenación e Integración de la FP obliga a que todos los alumnos realicen parte de su formación en empresas, sustituyendo al actual módulo (equivalente a las asignaturas) de Formación en Centros de Trabajo, que se cursaba en 2º. La nueva FP Dual podrá ser general (entre 500 y 750 horas durante los dos años del estudio, algo parecido al modelo de los últimos años, limitado a determinados grupos) o intensiva, que incluirá entre 750 y 1.000 horas. Es decir, hasta la mitad del ciclo formativo.

En cuanto a la evolución del alumnado, se pasará de 116.657 estudiantes matriculados este curso a una oferta de plazas de 135.820, lo que supone un crecimiento del 16% en el mejor de los casos, según los datos facilitados este miércoles por el conseller José Antonio Rovira y la directora general de FP, Marta Armendia. Los nuevos módulos que se tendrán que cursar en todos los ciclos o la mayor flexibilidad en las optativas a ofertar por parte de los centros son otras de las novedades de los estudios profesionalizantes.

Publicidad

«Existirá una mayor dualización, con formación en un entorno productivo real: empresas, entidades locales u organizaciones sin ánimo de lucro. La mayor diferencia es que se convierten en formadores, ya no se trata de que los alumnos acudan al final de su ciclo a completar sus estudios. Ahora, a partir de 1º, todos pisarán la empresa, tendrán un contacto real con el apoyo de los tutores de las entidades y del centro», ha resumido Armendia.

La modalidad de formación más extendida será la general, que abarcará entre el 25% y el 35% de la duración del ciclo formativo, lo que en horas se traduce en una horquilla de 500 a 750 de las que al menos cien serán en 1º (80 en el caso de los grados básicos). No existirá relación laboral ni remuneración, aunque la administración debe pagar la cotización a la Seguridad Social de todos los alumnos.

Publicidad

Opción remunerada

La opción más ambiciosa será la intensiva, que podrá abarcar entre el 35% y el 50% de la duración (750-1.000 horas), de las que al menos 250 se harán en primero. Actualmente ya cursan una modalidad similar aproximadamente el 5% de los alumnos, según los datos ofrecidos por la directora general, que ha defendido que se trata, a juicio de las empresas, «de una apuesta segura, pues los alumnos obtienen resultados antes y permite seleccionar ese talento que les falta y no saben dónde encontrar». En este caso sí existe relación laboral y remuneración a través de dos modelos: una beca o un contrato de aprendizaje en alternancia. En estos casos la cotizaciones y los costes correrán a cargo de las empresas.

Serán los centros los que decidirán qué modalidad aplican en función de los convenios de los que dispongan, aunque en el caso de la intensiva deberá contar con la autorización preceptiva de la dirección general. También tendrán autonomía para concretar los resultados de aprendizaje (objetivos, competencias y destrezas) que se aspira a conseguir durante las prácticas y cuyo porcentaje es mayor en la segunda modalidad.

Publicidad

«Cada equipo docente tendrá que seleccionarlos, pues son los que mejor conocen la realidad de su entorno, sus equipamientos, su tecnología y sus innovaciones, de los que ya nos gustaría disponer en los centros», ha lamentado Armendia. De hecho, ha insistido en que en los diez meses que lleva en la dirección general se ha encontrado con carencias en cuanto a espacios y equipos que no se esperaba.

En cuanto a los grandes números, la Comunitat contará el curso que viene con con 241 grupos nuevos, desde grados básicos hasta cursos de especialización, lo que se traduce en 19.163 plazas más sobre las realmente ocupadas durante este ejercicio.

Publicidad

Armendia ha defendido que para armar la oferta de FP se han atendido las peticiones de los centros y del sector empresarial, y en menor medida, del alumnado, en referencia a la demanda expresada en los procedimientos de admisión. Básicamente para no generar falsas expectativas. «Los alumnos eligen lo que conocen. Lo más demandado está relacionado con Informática y Comunicaciones, y también con Actividades Físicas y Deportivas, que sin embargo en este último caso presenta una empleabilidad muy baja», ha explicado.

También se ha referido a las familias de Administración y Gestión, Comercio y Marketing, Sanidad o Intervención Sociocomunitaria (en la que la ratio de peticiones por plaza es de dos a una). «Pero hemos tenido en cuenta especialmente la empleabilidad porque no queremos engañar a nadie, pues de poco sirve hacer un ciclo formativo para luego no poder materializarlo en inserción», ha reflexionado, antes de decir que diseñar una oferta para «satisfacer toda la demanda» de los estudiantes sería «engañarles y formarles para que acaben en el paro».

Noticia Patrocinada

Nadie quiere ser matricero

En este sentido, ha llamado la atención sobre el escaso tirón de estudios relacionados con los sectores productivos de fabricación industrial pese a que faltan profesionales. «Son profesiones que no se conocen, y nadie quiere ser algo que no está en su mente. ¿Cuántos hijos quieren ser matriceros y cuántos médicos o astronautas?», se ha preguntado de manera gráfica, para explicar a continuación que estas profesiones (incluidas las relacionadas con el mantenimiento de máquinas, más allá del sector del automóvil) «están muy bien pagadas».

Por ello, Armendia ha hecho hincapié en la importancia de la orientación del estudiante, aspecto que cobra protagonismo con la nueva FP derivada de la ley, pues incluye el módulo de Itinerario Personal para la Empleabilidad en grados básicos, medios y superiores. Otra novedad es que se flexibiliza la oferta de optativas, pues los centros, dentro de su proyecto educativo, tendrán facilidades para incluir áreas de otros estudios relacionados que también tengan autorizados, así como módulos de profundización, de lenguas extranjeras como el inglés o de refuerzo de materias como Matemáticas, Física o Química, por ejemplo para estudiantes que quieran acceder a carreras de Ciencias de la Salud.

Publicidad

Por su parte, el conseller José Antonio Rovira ha destacado que se vive «un momento histórico para la Formación Profesional» y que «va a cambiar el paradigma, pasando del tradicional enfoque centrado en el puesto de trabajo a un enfoque mucho más amplio centrado en el campo profesional». «La FP no es una segunda opción ni la hermana pequeña de nadie, sino el principio de una carrera profesional que podrá llevar a cada individuo hasta donde quiera llegar», ha defendido.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Empieza febrero de la mejor forma y suscríbete por menos de 5€

Publicidad