La ampliación de la V-21 será para carril bus y coches con al menos dos personas

Con las obras de la ampliación del tercer carril de la V-21 entre Alboraya y Valencia ya en marcha el Ministerio de Fomento confirmó este viernes la modificación del proyecto, ya que ese nuevo vial se reservará para autobuses y vehículos de alta ocupación, es decir, será un carril Bus-VAO tal y como había solicitado la Generalitat.

Así lo avanzó el secretario general de Infraestructuras del Ministerio de Fomento, Javier Izquierdo, tras su reunión con la consellera de Obras Públicas, María José Salvador, para abordar las conexiones de la autopista AP-7 cuando se liberalice el 31 de diciembre de 2019. Explicó que, como su departamento se encontró adjudicada la actuación por el anterior Gobierno, el ministerio intenta ahora «recoger el sentir de la Generalitat y de los ayuntamientos afectados».

Según Izquierdo, la separación de este carril Bus-VAO se hará mediante señales luminosas y no físicamente como se hizo en Madrid, lo que permite también «mayor flexibilidad» en el uso de la infraestructura. Respecto al número de ocupantes de los coches, no se determinó ayer. Es la autoridad responsable de cada carril quien estipula los requisitos aunque, por norma general, se suele fijar dos o más ocupantes.

El representante de Fomento también afirmó que se minimizará el impacto sobre la huerta al reducir la zona de expropiaciones, al menos, un tercio de la superficie prevista, que la plataforma Per l'Horta siempre ha fijado en 80.000 hectáreas de terreno.

Según explicó, la Ley de Carreteras exige expropiar ocho metros desde la arista de explanación de la infraestructura, por lo que el departamento de José Luis Ábalos ha decidido incorporar en esos metros los caminos de acceso a las huertas, que inicialmente se iban a hacer por fuera del dominio público.

Unos anuncios que fueron acogidos con satisfacción por Salvador, quien aseguró que «el 100% de los planteamientos valencianos han sido aceptados», ya que también se ha incluido la construcción de una pasarela que conecte Alboraya con Port Saplaya.

Aunque la V-21 se coló en la reunión de trabajo, el tema central fue la situación de la AP-7, donde Izquierdo reiteró «la certeza de que será una carretera libre de peajes». Un «escenario que ha cambiado», lo que llevará a la realización de nuevos estudios de planeamiento y tráfico que concluirán en un protocolo para determinar las actuaciones y programación de las obras, que realizará una comisión técnica.

De momento, Izquierdo confirmó la licitación de los enlaces de Vinaròs y Oliva sur (donde se ha rehecho el proyecto) el próximo año. También señaló que Fomento asumirá la conservación en 2020 por lo que se redactan ya los pliegos de mantenimiento por valor de 16 millones en la Comunitat y Cataluña.