Un año esperando una resonancia o una ecografía en La Fe

Se trata de pruebas que resultan esenciales para que especialista evalúe al paciente, le de un diagnóstico, y por tanto los tratamientos se retrasan demasiado tiempo, lo que pone en riesgo la salud de estos pacientes. La falta de personal técnico es el motivo principal que argumenta el sindicato por el que ocurre esta situación, que está generando «retrasos inaceptables» en la realización de estas pruebas diagnósticas.

No obstante, desde el hospital niegan ese retraso y señalan que La Fe realiza pruebas de radiodiagnóstico a unos 1.000 pacientes al día, de todas las modalidades, entre radiografía, TAC, ecografía y resonancia magnética, y los casos urgentes se atienden sin demora. Explican que se debe diferenciar las citas para primera prueba diagnóstica, para las que afirman que "en ningún caso es cierta esa demora", y las de pruebas sucesivas y de control, que se programan "ajustadas a la fecha prevista de la consulta de seguimiento" con el facultativo de cada paciente.

La lista de espera para una resonancia magnética con sedación supera el año, según UGT. Las ecografías presentan una demora promedio de entre nueve meses y el año. En otras pruebas importantes, también se registran tiempos de espera elevados. Son demoras que afectan gravemente el inicio oportuno de tratamientos esenciales. «El Servicio de Radiodiagnóstico es uno de los pilares fundamentales del hospital. Su labor es esencial tanto para el diagnóstico de patologías como para intervenciones quirúrgicas», apuntan fuentes de UGT. «Las demoras que estamos sufriendo afectan directamente la calidad asistencial. Un diagnóstico temprano es, en muchos casos, la diferencia entre la vida y la muerte», añaden.

No obstante, el hospital sí que cuenta con los equipos técnicos adecuados, tanto en cantidad como en calidad, ya que se ha renovado y ampliado su tecnología gracias a donaciones como las de la Fundación de Amancio Ortega, que también ha sufragado la mitad (25 millones de euros) del futuro centro de Protonterapia que va a construir La Fe. Además, el departamento cuenta con aparatología compleja que requiere formación adicional para su uso.

Pese a todo esto, la escasez de Técnicos Superiores en Imagen para el Diagnóstico (TSID) impide la correcta transmisión de conocimientos entre profesionales y obliga a cerrar agendas cuando los técnicos formados en la utilización de esas máquinas no están disponibles, denuncia el sindicato. «Es inadmisible que tengamos equipos de última generación sin el personal necesario para operarlos», expresa Cristina Escudero, delegada de UGT. «Hemos adquirido seis nuevos equipos de radiodiagnóstico para quirófano, pero ¿quién los va a utilizar? Los pacientes no pueden esperar más de un año por una prueba diagnóstica cuando tenemos la capacidad instalada para atenderlos adecuadamente».

La responsable sindical añade: «Es habitual que haya máquinas de resonancia cerradas por la falta de personal». Una circunstancia que dificulta que se pueda programar a más pacientes y se puedan reducir las listas de espera. «Estamos viviendo un auténtico caos, puesto que estos últimos años se han invertido millones de euros en maquinaria que ahora este gobierno de la Generalitat está echando a perder, no dotando del personal requerido para cubrir esta necesidad», apunta.

Esta situación obliga a muchos pacientes a optar por ser atendidos en centros privados para acelerar sus diagnósticos, por mediación del plan de choque de la Generalitat, en el que se derivan pacientes para reducir las listas de espera, a pesar de que los servicios públicos de La Fe disponen de la infraestructura necesaria para hacer frente a la lista de espera. «Mientras nuestros equipos están parados por falta de personal, se deriva a pacientes a la sanidad privada, generando un gasto adicional para el sistema público», apuntan desde el sindicato.

Esta situación hace que el sindicato exija ahora que se tomen medidas urgentes para solucionar el problema, ya que desde Sanidad no se aumenta la plantilla de TSID mientras se siguen derivando pacientes a centros privados. «Hemos trasladado esta problemática a la Junta de Personal, exigiendo una respuesta clara y soluciones por parte de la Gerencia del departamento, que a día de hoy sigue sin solventar este problema», señala Iván Solaz, secretario de la sección sindical de UGT en el departamento de salud de La Fe.

Además, instan a la conselleria a actuar de manera decisiva. «Es evidente la necesidad de reforzar los servicios públicos sanitarios. No podemos permitir que la infrautilización de nuestros recursos beneficie a terceros mientras los pacientes sufren las consecuencias», sentencian. Desde UGT no descartan tomar medidas de presión si la situación no se revierte de inmediato. «Es imperativo garantizar una atención sanitaria de calidad para todos los ciudadanos. Si no se toman acciones inmediatas, nos veremos obligados a movilizarnos en defensa de la sanidad pública», concluye el sindicato.